El Gobierno español presenta recurso de inconstitucionalidad contra una nueva ley catalana y el Tribunal Constitucional se reúne de manera extraordinaria en menos de 24 horas para admitir el recurso y suspender la entrada en vigor de la ley, de lo que a buen seguro volverá a advertir personalmente a los mandatarios independentistas, para que se pueda luego proceder individualmente contra ellos.

El Consejo de Ministros autorizó el viernes al mediodía presentar recurso contra la Ley de Transitoriedad Jurídica y Fundacional de la República Catalana, recién aprobada por el Parlament. El Pleno del TC estaba preparado para reunirse esa misma tarde y suspender la ley. Pero la norma no se había publicado en el Boletín Oficial de Catalunya y no había entrado en vigor, por lo que no podía recurrirse oficialmente. Visto lo visto, el Gobierno español se fue de fin de semana sin materializar el recurso y el TC dio la tarde libre a los doce magistrados. Así que cuando el BOC en su edición digital publicó la ley a última hora de la tarde del viernes, todos los campamentos de Madrid se habían levantado ya.

Fue ayer cuando el Ejecutivo de Rajoy registró su recurso de inconstitucionalidad ante el TC, asegurando que esta ley –junto a la del Referéndum, ya recurrida y suspendida– suponen «la mayor afrenta y amenaza a la destrucción de las normas de convivencia que la sociedad española se dio en el año 1978».

Cita a las 10 de la mañana

Conocida la petición del Gobierno español, el Pleno del Tribunal Constitucional celebrará hoy una reunión extraordinarias en la que admitirá la petición del Ejecutivo de Mariano Rajoy y, automáticamente, la Ley de Transitoriedad quedará suspendida por cinco meses.

Según algunas fuentes, el TC no quiso reunirse ayer y tomar esa decisión por ser jornada festiva en Catalunya, la Diada por supuesto.

En su recurso, el Gobierno solicita que se informe de la suspensión de la ley personalmente tanto al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, como al resto de miembros de su Govern; a la presidenta del Parlament de Catalunya, Carme Forcadell, y a los miembros de la Mesa; y a los integrantes de la Sindicatura Electoral, apercibiéndoles a todos ellos de que no pueden dictar ningún acuerdo dirigido a ejecutar las previsiones recogidas en esa ley.

La última reforma de la ley del Tribunal Constitucional, aprobada por el PP con su mayoría absoluta de la pasada legislatura, faculta a esta instancia para ordenar medidas ejecutivas contra quienes contravengan sus sentencias. Pero de momento esta facultad no se va a ejecutar, por temor a que ello podría romper la unanimidad con la que el TC se está pronunciando hasta la fecha contra el soberanismo catalán.

Cospedal, cadetes y la inquebrantable unidad

La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, arengó ayer a los cadetes de la Academia General Militar de Zaragoza, en su inicio de curso, recordándoles la «indisoluble unidad» de España, «hoy más inquebrantable que nunca». Aseguró que los españoles «tenemos la suerte de vivir en una de las grandes democracias del mundo», que «en apenas 40 años se ha convertido en símbolo de modernidad, libertad y prosperidad», un país «que desde su indisoluble unidad, hoy más inquebrantable que nunca, atesora en su seno la gran riqueza de su diversidad, la diversidad de sus culturas y territorios, la pluralidad de sus gentes y la tolerancia».

Añadió que España «es más que un Estado, es una larga historia de lazos compartidos, vínculos personales, familiares, culturales y sociales inmemoriales, de identidades diversas», con «infortunios y adversidades felizmente superados» y «conquistas y triunfos celebrados en común».

La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, estuvo acompañada en el inicio de curso de jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra, el general de Ejército Francisco Javier Valera; del general jefe de la AGM, el general de Brigada Luis Lanchares, y de otros representantes institucionales. GARA