Iñaki IRIONDO
GASTEIZ

El pacto PNV-PP dejó la mayoría del gasto para los presupuestos de 2018

El acuerdo del PNV con el Gobierno de Rajoy para apoyar los Presupuestos Generales del Estado de 2017 difería la mayor parte de las inversiones y decisiones a las cuentas de 2018, y desde el PP ya amenazan con que estarían en peligro si no se aprueban los nuevos PGE. El Ejecutivo español anunció ayer que su proyecto se retrasa.

El pacto firmado en mayo por Andoni Ortuzar y Mariano Rajoy para garantizar la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado de 2017 y al mismo tiempo salvar al Gobierno del PP, comprendía un amplio catálogo de inversiones y medidas relacionadas con la CAV, pero la mayor parte de ellas quedaban diferidas o comprometidas para 2018, e incluso para ejercicios posteriores.

La cuestión es que ni siquiera la presentación del proyecto de PGE para 2018 está garantizada. El Gobierno español anunció ayer que no lo aprobará en el Consejo de Ministros de este viernes, último plazo legal para hacerlo, y que esperarán a que se den las condiciones para que la aprobación en el Congreso esté asegurada, y eso pasa por lograr el visto bueno del PNV. En cualquier caso, el presidente del PP en la CAV, Alfonso Alonso, advirtió el pasado domingo en una entrevista en “El Mundo” que si los jeltzales no entran a la negociación, «está en peligro que se ejecuten los acuerdos logrados en 2017», porque «requiere una continuidad», y añadía que «a los vascos es a quienes más nos interesa que haya presupuestos en 2018».

En el pacto PNV-PP firmado en mayo de este año, las inversiones específicamente tasadas en las once páginas del acuerdo ascienden a 4,78 millones de euros a incluir en los presupuestos de 2017, mientras que para las cuentas de 2018 se concretan 11,73 millones, más del doble que para el ejercicio actual.

Casi todo lo referido al TAV

Prácticamente todo lo pactado en referencia a las obras de la “Y vasca” queda para los próximos años. Para la estación de Ezkio se anuncian obras por 4,1 millones de euros que comenzarían en octubre de 2018. El presupuesto de los trabajos en Astigarraga se cifran en 4,7 millones, pero se reparten en 150.000 euros en 2017, 3,8 millones en 2018 y 750.000 euros en 2019.

Lo mismo ocurre en otras inversiones anunciadas como la terminal de Jundiz, la Plataforma de Lezo-Pasaia, la supresión de pasos a nivel que deberían licitarse «en el último trimestre de 2018» y varias obras en el tramo Lezo-Errenteria. También se concreta que el laboratorio de innovación en Educación Digital Avanzada de la Universidad de Mondragon, con un presupuesto de 1,5 millones, se incluiría en «el proyecto de PGE para 2018».

La tarifa eléctrica industrial

Uno de los puntos del acuerdo más publicitados por el PNV es el relativo al coste de la energía eléctrica para la industria vasca. Pero las modificaciones que el Gobierno español se comprometió a efectuar se aclara que «se realizarán en la orden de tarifas de 2018».

El portavoz del Gobierno autonómico, Josu Erkoreka, afirmó ayer que, pase lo que pase ahora, «lo acordado está acordado para cumplirlo», aunque no sería la primera vez que Madrid se desdice de los pactos alcanzados con el PNV. Con esa misma premisa de la continuidad de lo pactado, Erkoreka apuntó que una prórroga presupuestaria no debería ser impedimento para cumplir el acuerdo.

 

Montoro anuncia que se aplazan las cuentas pero que las habrá

El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, confirmó ayer que el Gobierno español no aprobará tampoco en el Consejo de Ministros de este viernes el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2018 ante la falta de «seguridad en los apoyos», si bien afirmó que «con certeza» habrá cuentas y confía en que queden definitivamente aprobados a comienzos del próximo año.

Entre las razones para este aplazamiento, está la negativa del PNV de entrar en la negociación presupuestaria en tanto no se vea una solución para el conflicto abierto con Catalunya. El portavoz jeltzale en el Congreso, Aitor Esteban, reiteró ayer que, en este momento, dada la «crisis institucional de primer orden» que hay «no se dan las circunstancias para entrar en diálogo» con el Gobierno sobre los presupuesto. Además, ha considerado «frívolo» el interés en sacar adelante las cuentas con la actual gravedad del problema catalán.

En todo caso, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se mostró seguro de que al final habrá presupuestos. Sobre la posición del PNV, dijo que son «conscientes de la situación que estamos viviendo», y las «condicionalidades que suponen para cada grupo parlamentario», por lo que «una vez que se supere tendremos los Presupuestos posibilitados para 2018». Si el 1 de enero no hay nuevas cuentas, se prorrogarán automáticamente las de 2017 y luego pueden aprobarse las siguientes.GARA