El turismo y las problemáticas que genera han vuelto a ser debatidas en el pleno del Ayuntamiento de Bilbo. EH Bildu ha presentado una moción para «derivar los pisos turísticos que no cumplen la legalidad al alquiler residencial mediante Alokabide». La propuesta ha sido rechazada por PNV, PSE y también el PP.

Según los datos ofrecidos por el propio Ayuntamiento el pasado mes de setiembre, en la capital vizcaina habría 329 viviendas registradas y a los propietarios de unas 200 les han enviado cartas para que presenten alegaciones porque no cumplen con la normativa.

La portavoz de EH Bildu Aitziber Ibaibarriaga ha defendido que «la eclosión de este fenómeno de los pisos turísticos preocupa cada vez más a la ciudadanía que tiene problemas para alquilar una vivienda» y ha señalado que los precios en Atxuri o el Casco Viejo han subido durante los últimos meses, un 24% y un 45% respectivamente. El Casco Viejo es la zona en la que más anuncios de Airbnb tiene. De los 306 anuncios que había en verano en la capital vizcaina, más de la mitad (164) se concentran en Alde Zaharra, y los alquileres de pisos turísticos que ofrece en este barrio son más caros que en el resto de la ciudad.

Desde el Gobierno municipal han rechazado que la subida del alquiler tenga relación con los pisos turísticos. Tanto el concejal de Urbanismo, Asier Abaunza, como el responsable del área de Vivienda, Goyo Zurro, han apelado a estudios de otros ayuntamientos.

Sobre la propuesta de EH Bildu, Abaunza ha argumentado que Alokabide es competencia del Gobierno de Gasteiz, mientras Zurro señalaba que es complicado porque los propietarios que abogan por el alquiler público perciben unos 500 euros y el alquiler de media en Bilbo ronda los 900 euros.