El Athletic afronta esta noche un nuevo examen, otro más. Con la afición de uñas por el pobre bagaje de juego y resultados del primer tercio de temporada y por el desconcierto con el tema de la renovación de Kepa.

Esta noche llega a San Mamés un equipo que, tras cambios de entrenador y de numerosos jugadores, lo está haciendo muy bien en la Liga. Javier Calleja lleva poco tiempo al frente de la plantilla amarilla y quizás no muestre todavía el brillo de antaño, pero le está dando al equipo un aspecto serio, efectivo delante y compacto atrás.

Es precisamente lo que le falta al Athletic, espeso arriba, donde no es tanto que no marque goles como que no genere ocasiones de peligro real para hacerlos, e inestable atrás, donde la pareja Laporte-Núñez trata de coger empaque con el paso de los partidos, pero a quienes la ausencia de De Marcos y la irregularidad de Balenziaga no han terminado de ayudar.

En cualquier caso, al margen de errores puntuales en todas las posiciones y con la puntería a falta de ajustar cuando ya estamos en noviembre, la carencia más importante del equipo rojiblanco, que se verá puesta a prueba contra el Villarreal, es la falta de mando en los partidos, la ausencia de un patrón claro de juego. Ésa es la mayor responsabilidad de Ziganda y lo que le van a exigir en San Mamés desde las gradas.

Por si fuera poco, el reto se verá salpicado por el «culebrón Kepa». Una negociación con aristas por todas partes en la que lo último que se ha filtrado en este juego de las medias verdades es que la directiva ha dicho sí a todas las peticiones del portero. Puede que sea cierto y también que llegue demasiado tarde, cuando la decisión del de Ondarroa ya estaba tomada. Entretanto, no solo Herrerín sino también Unai Simón y Alex Remiro recuerdan que ellos están para lo que haga falta.

Kuko Ziganda mantiene que Kepa está tranquilo

José Ángel “Kuko” Ziganda se mostró «optimista» sobre la continuidad de Kepa Arrizabalaga en el Athletic en la comparecencia de ayer en la que declaró que ha hablado con el portero y que «está tranquilo. Está entrenando bien, los jugadores se sienten cómodos con él y el rendimiento que está teniendo en la Liga es muy bueno. Está sabiendo abstraerse del otro tema y eso es bueno para todos».

Añadió que es «optimista» sobre su continuidad y «más» al ser un jugador que se ha formado en el club y «con la ilusión que nos hace a todos que se quede».GARA