El expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero ha asistido en Donostia al acto de entrega de los premios Oroimen Hegoak que conceden las Juventudes Socialistas de Euskadi, premios que han recaído este año en él mismo, en el ex ministro de Interior Alfredo Pérez Rubalcaba y en el exdiputado Eduardo Madina.

En declaraciones a los periodistas, el expresidente ha pedido un esfuerzo colectivo para construir la «paz civil» en Euskal Herria que, a su juicio, pasa por lograr «el máximo de reconciliación» con «el recuerdo de las víctimas» y «el arrepentimiento absoluto de quienes perpetraron tanta sinrazón».

Ha asegurado que superar los años de violencia de ETA «llevará décadas», al considerar que hace falta «perspectiva y tiempo para un análisis más a fondo». «Trabajamos mucho por el fin de la violencia. El gran mérito es de la sociedad civil, de los demócratas, de los valores de la libertad», ha apuntado.

Ya en la clausura del acto, ha reconocido que le «cuesta» hablar de ETA, pero ha insistido en que «ETA se ha acabado. Cuanto más tarde en cerrar la persiana será peor para ella y sus presos». Es por ello por lo que ha considerado que «Euskadi nunca ha estado mejor, sin ETA y en paz con España».