El presidente de la UEFA, el esloveno Aleksander Ceferin, ha pedido a los asistentes al Congreso que se sumaran a guardar un minuto de silencio antes de iniciar la sesión, en señal de respeto a las personas de la familia del fútbol fallecidas desde el anterior congreso, en abril de 2017 en Helsinki.
Durante el mismo se ha exhibido el nombre todos ellos, incluido el del ertzaina Inocencio Alonso, que murió el jueves al sufrir un infarto mientras participaba en el dispositivo de seguridad desplegado cerca del estadio de San Mamés.
«El fútbol es un juego humano que une a los pueblos. Debemos defender nuestro precioso juego, debemos ser un ejemplo de apertura, hacer el fútbol europeo tan grande como puede ser», ha señalado el presidente Aleksander Ceferin en su discurso de apertura.
Ceferin ha destacado que «el fútbol es para todo el mundo en todas partes y es una escuela de vida que nos enseña que todo es posible», y ha recordado la puesta en marcha de la campaña «Equal» a favor de la inclusión y la tolerancia. «La única diferencia entre nuestros jugadores es el color de su camiseta», ha añadido.