Sarria ha señalado en declaraciones a Efe que cuando se habla de la «brecha salarial» hay que tener en cuenta que las cifras que se dan son las medias y que estas son consecuencia de aspectos como una «tardía incorporación» de la mujer al mercado laboral o «la falta de un reparto equitativo» de las cargas familiares.

Esto, precisa, hace que las mujeres tengan más dificultades de conciliación y por tanto más empleo temporal y más jornadas parciales que los hombres, y que su presencia en puestos directivos o de cualificación tecnológica o científica sea menor.

«La conciliación seguirá siendo de la mujer mientras no haya un reparto adecuado de los roles familiares», sostiene Sarría, y añade que se trata de «una cuestión cultural» ya superada en otros países europeos pero aún pendiente en el Estado.

De hecho, aunque reconoce un avance en la materia si se compara la actitud de la juventud actual con la de hace cincuenta años, subraya que en unos años la mayoría de jueces, notarios y registradores no serán hombres sino mujeres porque con estas oposiciones acceden «a un trabajo más seguro y en el que no tiene que viajar».

José Antonio Sarría indica, por otra parte, que la CEN no cuestiona la huelga feminista convocada para el 8 de marzo, de la que dice que, siendo «internacional», lo que espera de ella es que «sea un gesto pero sin dañar demasiado la productividad».

Por eso como representante de la patronal navarra ha deseado que que quienes la secunden lo hagan con la convocatoria de UGT y CCOO, de dos horas por turno, y no con la registrada por otros sindicatos «más radicales» para media jornada o jornada completa.