Ambas organizaciones también respaldan la huelga feminista convocada para este jueves, y animan a «usar nuestro hashtag #emakumekazetariak8M y que compartas en un tuit tu visión del ejercicio del periodismo siendo mujer».
En el manifiesto se destaca que «todas sufrimos el mismo machismo que las mujeres del resto de sectores –precariedad, inseguridad laboral, brecha salarial, techo de cristal, acoso sexual o ninguneos– pero con las particularidades asociadas a nuestra profesión».
De este modo, se denuncian aspectos como la brecha salarial, el techo de cristal para acceder a puestos de responsabilidad o la precariedad e inestabilidad laboral.
También se critica que «las dinámicas de trabajo priorizan el presentismo y la libre disposición y son ajenas a las necesidades de cuidado que tienen todas las personas (…) Una ausencia de conciliación real perjudica más a las mujeres, que acaban modificando o recortando sus horarios para poder cuidar e incluso abandonando su empleo o cambiando de profesión».
El ámbito periodístico no está exento de «acoso sexual y laboral» en los centros de trabajo, a lo que en este sector se suma el «acoso online, además de comentarios violentos y machistas en nuestras piezas».
En el manifiesto se subraya que «los espacios de opinión y las tertulias están masculinizados» y que los medios «la visión de la realidad que transmiten es muchas veces parcial y está sesgada porque no tiene en cuenta en la misma medida las experiencias, los relatos y las vivencias de las mujeres que, a menudo, son tratadas como personajes secundarios o con estereotipos».
Las periodistas firmantes remarcan que lo hacen a título individual e invitan «a la audiencia y a lectores y lectoras a ser cómplices de nuestras demandas».