En las últimas semanas, Instituciones Penitenciarias ha rechazado las peticiones para progresar del primer al segundo grado que han efectuado 54 presos políticos vascos en el marco de la ofensiva jurídica aprobada por EPPK en el debate que concluyó en junio, para intentar vaciar las cárceles.
Según la agencia Efe, el argumento con el que Prisiones ha rechazado las solicitudes es que ninguno de los presos se ha desvinculado de ETA ni esta ha acordado su disolución.
Conseguir el acceso al segundo grado penitenciario es el reto inicial de la ofensiva jurídica que ha desplegado EPPK para lograr acercamientos y excarcelaciones. De esta manera, cada persona presa ha elaborado su dossier penitenciario y judicial, además de reflexionar sobre cuál es su criterio propio sobre objetivos y vías a recorrer para ello.
En el Estado español, la clasificación de grado debe ser revisada cada seis meses y hay opción de recurrirlo ante el Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria, que es lo que están haciendo los integrantes del Colectivo de Presos Políticos Vascos. El 95,5% sigue hoy en primer grado.