«No será fácil», ha señalado Barley, en declaraciones al diario ‘Süddeutsche Zeitung’ después de que la Audiencia Territorial de Schleswig-Holstein pusiera en libertad a Puigdemont y descartara su extradición al Estado español por el delito de «rebelión».
«La decisión de los jueces de Schleswig es absolutamente correcta. La esperaba», ha explicado.
Si el Estado español no justifica el otro delito que imputa al president, el de malversación, se levantaría la orden de detención, «entonces Puigdemont será un hombre libre en un país libre, es decir, en Alemania», ha añadido.
A su juicio, «ahora habrá que hablar también de los componentes políticos».
Barley es la primera miembro del Gobierno de Angela Merkel que manifiesta una opinión sobre la resolución de la Audiencia Territorial.
En rueda de prensa, la viceportavoz del Ejecutivo, Ulrike Demmer, se ha limitado a recordar que el caso está exclusivamente en manos de la Justicia, sin hacer ningún tipo de valoración.
«No hay nada nuevo que se pueda decir sobre el tema, se trata de un caso que está en manos de la Justicia y que no afecta a las relaciones entre los dos Gobiernos», ha manifestado Demmer.