Soledad GALIANA
DUBLÍN

El UKIP desaparece en unas elecciones que no dan ventaja a laboristas o tories

Los resultados de las elecciones locales parciales que han tenido lugar en algunos municipios británicos no han sido tan decisivos como se esperaban. Si bien es cierto que los laboristas han ganado más concejalías, la noticia del día ha sido la desaparición del xenófobo UKIP.

Con prácticamente todos los resultados definitivos de estas elecciones locales parciales que han tenido lugar en algunos municipios de Gran Bretaña, el Partido Laborista ha conseguido 2.301 concejales, cincuenta más que en las mismas elecciones hace cinco años, mientras que los conservadores han perdido 31 y se sitúan en 1.330.

Así pues, victoria laborista, pero con un progreso limitado que no le permite al partido presentarse como un gobierno a la espera. Si bien es cierto que con algunos logros –como la victoria de Plymouth, que arrebata a los conservadores, y acabar con las mayorías conservadoras en otros municipios– también han cedido Derby a los conservadores.

Cuando estos resultados se proyectan sobre las elecciones generales, la situación es más positiva para los laboristas. El diario “The Guardian” se refiere a las proyecciones de John Curtice, que calcula que conseguirían 283 escaños en Westminster frente a los 262 de 2017, y se convertirían en el partido mayoritario, mientras que Michael Thrasher asegura que sus cálculos apuntarían a un resultado similar al de 2017.

Entre las causas que se apuntan para que el voto laborista no haya sido todo lo fuerte que se esperaba se encuentra, una vez más, la polémica creada desde las filas del propio partido por quienes se oponen al giro al laborismo más tradicional de Jeremy Corbyn. Ahora, las acusaciones de que Corbyn ha permitido expresiones de antisemitismo en las filas del partido les han afectado principalmente en Londres. ¿Puede la primera ministra conservadora Theresa May respirar tranquila? Quizás el futuro electoral de May no dependa tanto de los votantes como de aquellos dentro de su partido que cuentan los días para que el Brexit, que les ha castigado en varios distritos, se haga efectivo y puedan organizar el golpe de estado que acabe con su carrera política.

Mientras los LibDem (liberales) han conseguido llegar a los 536 concejales, 75 más que en las últimas elecciones, el antieuropeo UKIP se ha quedado en 3 concejales, tras perder 123, siguiendo los pasos de sus antecesores BNP hacia la desaparición.

 

West Tyrone, en manos de Sinn Féin

La candidata de Sinn Féin, Órfhlaith Begley, ha ganado las elecciones de West Tyrone en las que los votantes la han elegido como sustituta del republicano Barry McElduff en el escaño del Parlamento de Westminster, en Londres. Begley aventajó sin problemas al resto de los candidatos, con casi 8.000 votos más que el segundo candidato más votado, el unionista Tom Buchanan, del DUP. Begley recibió 16.346 votos frente a los 8.390 votos de Buchanan.

Sinn Féin se hizo con el escaño en 2001 y desde entonces este se ha mantenido en manos republicanas, primero en manos del que fuera vicepresidente del partido, Pat Doherty, seguido de McElduff y ahora queda en manos de la abogada de 26 años Órfhlaith Begley, hija de un concejal de Sinn Féin y la única mujer en la lista de candidatos.

Entre sus prioridades se encuentran el Brexit, la mejora de la infraestructura, la economía y el empleo.

La anécdota de las elecciones fue la detención de un hombre armado en un colegio electoral en Dunganon.S.L.