PNV, EH Bildu y Elkarrekin Podemos son los tres únicos grupos que llevaron a la reunión de la Ponencia de Autogobierno sendos textos que puedan servir para llegar a un acuerdo sobre el preámbulo del nuevo estatus que se pretende redactar. Tras un análisis de los respectivos documentos, se buscará alcanzar un consenso amplio sobre el mismo, para el que ayer ya se produjo un primer acercamiento.

Aunque en sus declaraciones públicas otros grupos no quisieron entrar en las interioridades de la reunión, el portavoz del PP, Borja Sémper, sí que afirmó –en un tono muy crítico– que PNV, EH Bildu y Elkarrekin Podemos se habían «emplazado» para llegar a un acuerdo sobre el preámbulo «dejando de lado al resto de partidos», lo que denunció como un paso que «nos lleva a la política de bloques y de enfrentamiento».

Desde el PSE, José Antonio Pastor también parece ver la probabilidad de un acuerdo entre estas tres formaciones, que además prevé que podría ser recurrido en el futuro por el Tribunal Constitucional, y aludió que metodológicamente se contempla la posibilidad de que los grupos presenten votos particulares con su opinión sobre aquellos puntos en los que discrepen. Cabe recordar que lo que la Ponencia de Autogobierno está trabajando son unas bases sobre las que después una comisión de expertos elaborará el texto articulado del Nuevo Estatus.

Lander Martínez, de Elkarrekin Podemos, criticó que en los textos presentados se haya caído en «maximalismo» que pueden bloquear la ponencia, pero también vio potencialidades para llegar a un acuerdo.

Ningún representante de PNV o EH Bildu compareció ante la prensa tras la reunión, pero fuentes del grupo independentista la calificaron de «positiva» y apuntaron que tras la cita «estamos un poco más cerca del nuevo estatus que necesita la sociedad vasca».

Indignación del PP

Especialmente virulenta fue la reacción del PP, que estableció una relación directa entre la propuesta de preámbulo presentada por el PNV y el comunicado final de ETA en el que se apunta como reto principal de futuro acumular fuerzas y materializar el derecho a decidir.

Borja Sémper quiso dar relevancia al «contexto» en el que se produjo la reunión de ayer, después del comunicado de ETA y de la cita de Kanbo en la que estuvieron presentes PNV, EH Bildu y Elkarrekin Podemos. «Una semana después de Kanbo –declaró el portavoz del PP– el PNV nos presenta en este Parlamento la propuesta más radical de su historia» que, a su entender, rompe con la legalidad constitucional y estatutaria y hace un «relato complaciente» de la violencia en la que «diluye la responsabilidad de ETA».

Según Sémper, «esto es el Estatuto de Kanbo» que «recoge la hoja de ruta marcada por ETA».

El camino tomado por el PNV, puede «reventar la legislatura», en opinión del PP, lo que tendría graves consecuencias políticas, sociales y económicas. Borja Sémper emplazó al lehendakari, Iñigo Urkullu, a que «aclare este situación».

En todo caso, pese a haber dicho que el PNV sigue la hoja de ruta marcada por ETA, que está poniendo en peligro la estabilidad en la sociedad vasca, y volviendo a la política de bloques y enfrentamientos, con una estrategia en al que el PP se siente excluido, Borja Sémper aseguró que nada de ello impedirá que su partido busque un pacto sobre los Presupuestos Generales del Estado con los jeltzales, que vaticinó que votarán a favor de las cuentas de Rajoy.

Nueva cita el miércoles

La Ponencia de Autogobierno volverá a reunirse el próximo miércoles al mediodía. Para entonces podría haber un acuerdo sobre el preámbulo entre las tres fuerzas que parecen estar dispuesta a acercar posiciones, y que previsiblemente mantendrán encuentros entre ellas antes de la nueva cita.

En todo caso, habrá que ver cómo evolucionan los acontecimientos. El portavoz de Elkarrekin Podemos, Lander Martínez, comentó ayer ante los medios la conveniencia de que el PSE presentara también una propuesta por escrito para dicho preámbulo. Además, de cara al acuerdo final sobre todo el articulado, el partido morado sostiene la necesidad de que sea «trasversal» y con el mayor apoyo posible.

El PP, pese a las duras críticas después de cada reunión, seguirá acudiendo a la Ponencia de Autogobierno, donde cree que es necesaria que se escuche su posición política.