Fuentes de la UEFA han confirmado a la agencia EFE que el organismo «no está considerando cambiar la sede de Bilbao, aunque ha habido algunos retrasos en el establecimiento de la estructura organizativa local».

«Estamos seguros de que la situación se resolverá en breve y de que se recuperará el tiempo perdido para que haya un gran evento en Bilbao», han indicado desde la UEFA.

El presidente de la Federación española de fútbol, Luis Manuel Rubiales, ha explicado este martes que en los últimos meses, antes de su llegada al cargo el pasado 17 de mayo, ha habido problemas porque no había «una contestación clara» por parte de la Federación española a los requerimientos de la UEFA.

«Mientras que desde UEFA se instaba a la Federación a crear ese consorcio, ese órgano que dinamice y que garantice esos partidos van a celebrar en Bilbao, no había una contestación clara. Ya hemos hablado y hemos quedado en arreglarlo, porque estaban planteándose quitar la plaza a Bilbao», ha afirmado.

Rubiales ha asegurado que desde la RFEF se va a «hacer todo lo posible porque la UEFA vea que hay una Federación que quiere ayudar y que todos los aficionados vascos puedan disfrutarlo». «Si hubiéramos seguido en la misma situación habríamos perdido Bilbao», ha añadido.

Bilbo es una de las doce ciudades elegidas por la UEFA para albergar partidos de la próxima Eurocopa 2020, con la que celebrará el 60 aniversario de la competición y está previsto que el estadio de San Mamés sea escenario de cuatro partidos, los días 15, 20, 24 y 28 de junio de 2020.

Los tres primeros corresponderán al grupo E, en el que estará la selección española si se clasifica, y el último encuentro será de octavos de final, y enfrentará al campeón del grupo B con uno de los terceros clasificados de grupo, el del A, el del D, el del E o el del F, según el calendario definido recientemente por la UEFA.