El presidente español, Pedro Sánchez, ha indicado que el acercamiento de los presos vascos se iniciará con aquellos que están enfermos y con los mayores de 70 años. Ha hecho esas precisiones en una conversación informal con periodistas en el Congreso, tras participar en el debate sobre los asuntos que abordará el Consejo Europeo que se va a celebrar mañana y pasado sobre la inmigración.

No obstante, ha querido dejar claro que el cambio de prisión depende de Instituciones Penitenciarias y requiere de «mucho trabajo técnico».

Horas antes, en su intervención en el hemiciclo, Sánchez había pedido apoyo al Congreso para revisar la política penitenciaria.

El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, también se ha referido al tema en los pasillos del Congreso y ha señalado que se hará un estudio individualizado «caso por caso» que determinará si es «oportuno o no el traslado» de un preso teniendo en cuenta circunstancias como la edad avanzada, el estado de salud, el rechazo a ETA o la parte de la condena que haya cumplido. Son requisitos, ha dicho, «más que razonables para tenerlos en cuenta» y «se van a evaluar».

En cualquier caso ha explicado que deberán señalarlos las juntas de tratamiento de cada prisión.

Grande-Marlaska ha insistido en que esos estudios valorarán la necesidad, razonabilidad y proporcionalidad del traslado de forma individualizada según las circunstancias personales de cada preso y siempre con «sometimiento a la legislación penitenciaria».

«Nada de traslados colectivos», ha enfatizado, para recordar que el único traslado colectivo se produjo con el Gobierno de Aznar a finales de los 90, con ETA aún en activo.

En cuanto a las fechas y los plazos, el titular de Interior ha precisado que es imposible de determinar dado que se trata de estudios individualizados de la situación de cada prisionero.

«Será cuando las circunstancias personales de cada preso, en relación a la resocialización, a los requisitos de tratamiento individualizado y sometimiento a la legislación penitenciaria puede establecerse que es adecuado para ese interno en concreto el traslado, nada de traslados colectivos como vuelvo a decir, ocurrieron en otra fecha», ha recalcado.

Una veintena de enfermos y tres mayores de 70

En la actualidad, hay diez presos con enfermedades graves en cárceles fuera de Euskal Herria cuyos casos son públicos y otra decena están también gravemente enfermos pero prefieren acogerse al anonimato. 

El listado de mayores de 70 años incluye a tres presos.