ERC ha aprobado este domingo en conferencia nacional la hoja de ruta que determinará la acción del partido para los próximos años. La ponencia ha recibido el visto bueno de la militancia con 511 votos a favor, seis en contra y 19 votos en blanco.
«Si ante un cierre persistente del Gobierno español no es posible un referéndum de autodeterminación, no se puede descartar una declaración de independencia», resume el párrafo clave de la ponencia. ERC precisa que la declaración de independencia debería cumplir con las condiciones que fijó el Tribunal Internacional de Justicia de la Haya en el caso de Kosovo.
El texto también incluye que el partido se planteará actos de desobediencia civil «cívicos y pacíficos» tanto de sus representantes como de la sociedad catalana si existen actuaciones políticas, judiciales y policiales que se consideren represivas.
Pero la idea principal de la dirección de ERC es la de hacer crecer los apoyos a la independencia: «Si queremos ganar, necesitamos ser más y más fuertes. Hay que fortalecer la sociedad catalana, tejer una malla impenetrable».
La ponencia también encarga al partido insistir en la necesidad de diálogo con el Estado, y asegura que la mejor opción para todas las partes sería una salida ‘a la escocesa’, es decir, con acuerdo entre el Gobierno central y el catalán sobre la celebración de un referéndum legal y pactado.