El técnico navarro, que ha sido seleccionador chileno femenino desde enero de 2017, regresa a Iruñea para hacerse cargo de un equipo que afronta un nuevo proyecto con importantes cambios en la plantilla.

Aniz ha comentado en conferencia de prensa que la temporada 2014-2015 fue «bonita y dura», ya que llegó al club «un poco a ciegas», pero ahora, en esta segunda etapa, la situación ha cambiado, ya que la mayoría de los jugadores le conocen a él y su forma de trabajar.

Tras resaltar que afronta este nuevo reto «con muchas ganas» y «bastante determinación», Aniz ha declarado que está deseando «empezar lo antes posible» una temporada que estará precedida de cinco o seis amistosos de preparación.

Aniz ha señalado que Helvetia Anaitasuna tiene «un buen equipo», en el que ha habido cambio de centrales, en la portería y de entrenador, por lo que ha considerado que habrá que tener «un poco de paciencia para ver los frutos».

El entrenador ha apuntado que esta campaña es muy diferente a la 2014-2015 y en este sentido ha subrayado que en cada momento hay que ver «qué realidad deportiva se tiene para sacar el máximo rendimiento».

«Es un año de cambios», ha indicado Aniz, que ha comentado que «hay que tener tranquilidad», porque «con trabajo y una buena plantilla se van a conseguir resultados».

El nuevo técnico del club navarro ha asegurado que este proyecto deportivo se basa en el mantenimiento de la filosofía de cantera del Anaitasuna para que los jóvenes jugadores formen parte de la primera plantilla a corto o medio plazo.

Así, cinco o seis jugadores de la cantera harán la pretemporada y se van a entrenar con el primer equipo.

El objetivo, ha insistido, es «trabajar con los jóvenes y darles responsabilidad», para que los jugadores «puedan progresar en la casa».