Imanol CARRILLO

Pocas caras nuevas y muchas jóvenes, los desafíos de Athletic y Real

Los dos equipos vascos que militan en la Primera División femenina arrancaron ayer mismo lapretemporada, el mismo día que se sorteó el calendario de Liga 2018/19, que finalizará el 5 de mayo.

Lezama y Zubieta acogieron ayer las primeras sesiones estivales de Athletic y Real, respectivamente, en una pretemporada que se alargará hasta el fin de semana del 9 de setiembre, momento en que comenzará la verdadera competición liguera.

Las rojiblancas fueron las más madrugadoras de los dos equipos, ya que tras pasar los reconocimientos médicos el día anterior, se ejercitaron sobre el césped por la mañana, coincidiendo con el sorteo del calendario, que por primera vez se hizo el mismo día que los de Primera y Segunda masculinos.

También lo hicieron con la noticia de que Marta Unzué, mediocentro o incluso lateral derecha de 30 años del Barcelona –equipo contra el que comenzará la Liga el Athletic–, jugará cedida en el conjunto vizcaino durante las dos próximas temporadas. Ayer aún no estuvo con sus nuevas compañeras –aunque ya ha pasado el reconocimiento médico–, como tampoco lo hicieron las internacionales Lucía García Córdoba, Maite Oroz, Damaris Egurrola, Andrea Sierra y Oihane Hernández, una de las futbolistas que asciende junto a Ane Azkona.

Así, el técnico Joseba Agirre contó con 22 jugadoras en el primer entrenamiento: además de Azkona, Ainhoa Tirapu, Ainhoa Vicente, Garazi Murua, Ainhoa Álvarez, Nekane Díez, Yulema Corres, Jone Ibáñez, Andere Leguina, Eunate Arraiza, María Díaz Cirauqui, Marta Perea, Erika Vázquez, Leia Zarate y Vanesa Gimbert –que continúan de la pasada temporada–, y las jugadores del B Paula Esteban, Arrate Juste, Nerea Nevado, Mariana Cerro, Amaiur Sarriegi, Oihane Valdezate y Naroa Uriarte, que intentarán «hacerse un hueco» en el equipo, como dijo Agirre.

Respecto a la pasada campaña, ha causado baja la defensa Ane Bergara, mientras que Alazne Gómez y María Blanco, lesionadas de larga duración el anterior curso, jugarán con el filial cuando dispongan del alta.

La pretemporada rojiblanca cuenta, de momento, con sesiones en Lezama, un stage en Boltaña del 1 al 5 de agosto, un amistoso –contra el Logroño el 8 de agosto; se ha caido un torneo por falta de patrocinio– y la final de la Euskal Herriko Kopa, que se disputará ante la Real el 2 de setiembre en horario y lugar por confirmar.

Teniendo en cuenta que los equipos –como el Levante– se están reforzando con jugadoras extranjeras, el objetivo sigue siendo el mismo del año pasado, en el que el Athletic fue tercero. «Es una motivación grande la que tenemos que tener para pelear contra esos equipos con nuestra filosofía. Tenemos que poner en valor lo que somos: un equipo solidario, ambiciosos, más equipo que ninguno. Somos gente de aquí, amamos la camiseta, soñamos con jugar en el club desde pequeño... Tenemos que hacer cosas distintas a lo que hacen otros equipos; si no estamos perdidos», señaló el técnico del primer equipo.

La Real se estrenó por la tarde

Ya por la tarde, en el campo z4 de Zubieta, fue el turno de la Real, que este curso, aunque ha mantenido la columna vertebral del año pasado, presenta nuevas caras en el equipo con los fichajes de Oihana Aldai, Marta Cardona, Sara Olaizola, Kiana Palacios (se incorporará en próximas fechas, al igual que Nerea Eizagirre) y Maddi Torre.

Gonzalo Arconada y su cuerpo técnico –han entrado Iñaki Goikoetxea, exfutbolista del Real Unión, entre otros, e Iker Domínguez, mientras Leyre Eleizegi continuará como delegada del equipo– también apuesta por la cantera. Ayer estuvieron las jóvenes del filial Erkuden Lasa, Ane Campos, Saioa Martinez de Olkoz, Elene Lete y la externa Ceci Marcos (Añorga KKE). «Algunas van a estar entrenando con nosotros con regularidad y queremos que vayan teniendo su peso en la plantilla», señaló el entrenador txuri urdin.

Gonzalo Arconada podrá hacer el equipo que desee desde la pretemporada, ya que cogió las riendas del equipo en noviembre de 2017 tras sumar la Real siete derrotas en las siete primeras jornadas. Finalmente el conjunto txuri urdin acabó octavo, y se clasificó para jugar la Copa.

«Tenemos que hacer un buen trabajo en pretemporada, construir ahí bien el modelo de juego del equipo, que tengamos muy claro a lo que queremos jugar, y con el entrenamiento diario y semanal, conseguir que el equipo sea muy competitivo, muy difícil de batir y que de un grupo de buenas jugadoras consigamos hacer un buen equipo», explicó ayer sus objetivos.

La Real tiene la pretemporada perfilada, con cuatro amistosos –contra Osasuna el 4 de agosto; Girondins el 10 de agosto; el torneo Gipuzkoa Elite Women Football Cup del 17 al 19 de agosto; y EDF Logroño el día 25– antes de la Euskal Herriko Kopa ante el Athletic y de viajar a Tenerife en el inicio liguero.