Un futbolista radiante. Así se mostró ayer Patrick Twumasi en su presentación oficial como nuevo jugador del Alavés para las próximas cuatro temporadas. Y no es para menos. Después de haber militado en competiciones como la letona, rusa o kazaja, al extremo ghanés de 24 años le llega la oportunidad de su vida para destacar en una liga con bastante mayor seguimiento mediático mundial.
«Soy muy feliz por estar aquí y daré lo mejor de mí para ayudar al Alavés y que los aficionados estén orgullosos de mí», fue su tarjeta de presentación en la «calurosa bienvenida» que tuvo por parte de la hinchada babazorra. Jugar «en una de las ligas más importantes que hay» y hacerlo en un «equipo importante» fueron las dos razones que motivaron al jugador africano a dar el paso.
«He trabajado muy duro para tener esta oportunidad, seguiré haciendo lo mismo e intentaré hacer lo que pueda para ayudar al equipo a ganar partidos», amplió el futbolista, quien apuntó que su posición natural es desenvolverse por la banda derecha, si bien en algunas ocasiones también lo ha hecho por el costado izquierdo e incluso se ha manejado como ariete.
Wakaso, cicerone
Antes de tomar la decisión definitiva de hacer las maletas en dirección a Gasteiz, Twumasi reconoció que habló con su compatriota y ahora de nuevo compañero de equipo, Mubarak Wakaso. «Me dijo muchas cosas buenas del Alavés, que es un conjunto familiar y un buen equipo», relató, al mismo tiempo que asumió que el hecho de contar con el pivote tan cerca le va a permitir que el periodo de aclimatación sea más rápido.
Precisamente la adaptación es algo que al director deportivo del Alavés, Sergio Fernández, no le preocupa, dado el pasado deportivo del jugador, quien ya ha disputado «competiciones europeas de manera regular (con el Astana) y su nivel de adaptación está fuera de toda duda».
Asimismo, el máximo responsable técnico desveló que al futbolista se le estaba realizando seguimiento desde hace un año y que es la figura que le falta al cuadro vasco «en cuanto a profundidad y capacidad de generar situaciones desde la segunda línea». «Espero que tenga la suerte para poder transmitir sus características porque, si lo logra, nos va a hacer disfrutar».