REAL 1

ALAVÉS 2

El Alavés se impuso 1-2 a la Real en el derbi amistoso que jugaron en Zarautz. Fue un buen espejo del momento que atraviesa cada equipo, con una Real que sigue intentando amoldarse al libreto de Asier Garitano y un Alavés que tiene muy interiorizado lo que quiere Abelardo.

Asier Garitano, fiel a su filosofía de utilizar diferentes registros dependiendo del rival y de la situación, sorprendió al plantear una defensa con tres centrales –Zubeldia en el centro para sacar el balón, con Llorente a la derecha y Héctor Moreno a la izquierda– y los dos laterales, Zaldua y Kevin adelantados.

La verdad es que el arranque resultó un poco frustrante para ellos, ya que antes de cumplirse los tres minutos de juego Zubeldia, que no se entendió con Juan Carlos Moyà, marcaba en propia puerta al desviar un centro de Javi López que ya antes había tocado en Diego Llorente.

Más allá de esa jugada puntual, parecía que a Illarramendi le costaba encontrar su posición en ese nuevo esquema, molestándose un par de veces con Zubeldia en la salida de balón, mientras que los laterales tampoco lograban entrar demasiado en juego, seguramente por la buena labor defensiva de un Alavés muy compacto que tiene los automatismos mucho más engrasados que la Real.

No obstante, según avanzó el reloj, los guipuzcoanos se fueron encontrando más a gusto sobre el verde. Dos córners consecutivos al cuarto de hora llevaron el primer peligro a la meta de Sivera, con Llorente y Agirretxe, titular ayer, ganando buenos balones por arriba.

Y esa mejoría se vio refrendada a la media hora, cuando un gran pase de Illarramendi dejaba la puerta abierta dentro del área a Oyarzabal, que cedía atrás para que el joven Sangalli volviera a marcar, con la colaboración de Sivera, en su buena pretemporada. Además, Maripán se lesionaba en esa misma acción, siendo sustituido por Ximo Navarro, e Ibai Gómez también se retiraba con algún problema físico. Abelardo, muy contrariado, daba entrada a Burgui.

Repetición de la jugada

Cada equipo afrontó la segunda parte de manera distinta. Mientras Garitano optaba por cambiar todo el equipo tras el descanso, Abelardo fue haciendo sus cambios poco a poco. Y el Alavés volvía a adelantarse nada más reanudarse el partido cuando Borja Bastón marcaba el riguroso penalti señalado a Gorosabel. Una diferencia que los babazorros defendieron el resto del partido como si hubiera tres puntos oficiales en juego.

La Real, con bastantes chavales en el once, intentó perforar el muro defensivo albiazul sin demasiado acierto. El peligro llegó sobre todo por medio de Willian José, al que no le pitaron un penalti claro, y Juanmi, quien sí pudo marcar una pena máxima poco después –cometido por Martin sobre Capilla–, pero que fue anulada por el árbitro, fallando luego el segundo intento. Con la Real volcada, Guidetti no acertó a sentenciar en el último minuto.