El Departamento de Seguridad ha informado de que el arrestado, de 53 años, ha pasado esta tarde a disposición judicial y ha sido puesto en libertad, aunque las fuentes no han detallado si se le han impuesto medidas cautelares.

Los hechos sucedieron pasadas las 4.15 de la madrugada del lunes, cuando una patrulla de la Ertzaintza que se encontraba por las cercanías del puerto, una de las zonas más transitadas durante estas fiestas de Aste Nagusia, fue requerida por un particular por la presencia de un hombre sospechoso en un aparcamiento de la zona portuaria.

Los ertzainas se desplazaron al lugar y localizaron al hombre, que en ese momento se encontraba recogiendo una pequeña cámara del suelo.

El sospechoso explicó a los agentes que había colocado previamente varias cámaras, hasta un total de seis, con la intención de grabar a las mujeres que se acercaban a ese lugar para orinar, y que en ese momento estaba recogiendo los dispositivos de grabación.

Los agentes identificaron al hombre y lo detuvieron por agresión a la intimidad de sus víctimas. 

En declaraciones a los medios, el alcalde de Donostia, Eneko Goia, ha explicado que la Ertzaintza «intervino a este hombre y se comprobó que tenía seis cámaras en su posesión, así como material filmado mediante estas cámaras».

«A partir de ahí se procedió a su detención y la investigación está en manos de la Ertzaintza para saber cuántas más veces ha podido tener ese comportamiento y qué material puede tener de sus filmaciones anteriores», ha señalado.