Tras semanas de ardua labor y muchos planes más o menos cumplidos, Bilbo se prepara para recibir esta tarde, a las 19.00, en la plaza del Arriaga, a la musa de Aste Nagusia. Marijaia retorna al Botxo para hacer posible que la semana más larga del año esté repleta de fiesta y alegría, sin olvidar ese espíritu acogedor que convierte a todo el que lo desee en bilbaina y bilbaino de pro.
Al cumplirse 40 años de aquella Aste Nagusia que comenzó con una bulliciosa bajada desde Begoña, qué mejor pregonero que el polifacético Zorion Egileor, quien en 1977 desde las ondas de la popular Herri Irratia convocó una kalejira para reivindicar unas fiestas como las que ahora disfruta la villa. A su lado, la txupinera, la comparsera de Aixeberri Saioa Domínguez, fiel representante de las nuevas generaciones que han fortalecido un modelo festivo singular.
Antes de que la jarana se desate en El Arenal, a partir de las 17.00, arrancará en un lugar tan simbólico como el puente de San Anton la kalejira del txupin, encabezada por la propia encargada de lanzar el cohete seguida por sus compañeros de comparsa, abriendo camino al resto. Será un precalentamiento para lo que se espera en los alrededores del teatro neoclásico cuando los brazos de Marijaia asomen en su balconada para llamar a la fiesta, aunque no hará falta.
Contra las agresiones
Mientras se daban los últimos retoques a las decoraciones de las txosnas, hubo tiempo ayer para que comparseras y comparseros colocasen a lo largo del recinto festivo banderines, pancartas y mensajes de la campaña que va a desarrollar Bilboko Konpartsak con el lema ‘‘Nik gozatu, zuk errespetatu, hura zaindu’’.
Entienden que hay que reivindicar los valores feministas para acabar con las agresiones, dejando claro que no cederán ante el miedo y «enseñarán los dientes ante cualquier actitud agresiva y machista».
Desde las administraciones, Policía Municipal y Ertzaintza consideran que evitar los ataques sexistas es una de sus prioridades en materia de seguridad, como lo es que disminuyan los hurtos y las peleas que se producen en Aste Nagusia. Para ello, está previsto un importante despliegue de efectivos, además de la instalación de cámaras.
También se advierte del peligro que entraña tirarse a la Ría desde los puentes.