«No cambiaría ningún gol que he marcado en la Real por millones de euros en otro equipo», ha subrayado el de Usurbil en su despedida. «Es un día muy feliz para mi en un día en el que he tenido que tomar una decisión que es la mejor que podía tomar. La última lesión me hizo ver que tenía que tomarla y poner punto final a una carrera muy brillante para mí», ha señalado casi entre lágrimas.

El ariete ha estado respaldado por el presidente Jokin Aperribay, directivos, compañeros de equipo y técnicos de las categorías inferiores. «Ser jugador de la Real lo ha sido todo, pasé de ser futbolista a ser jugador de la Real cuando entré en el primer equipo, es lo que más feliz me hace y hoy es un día también muy feliz», ha insistido.

Ha tenido también palabras de elogio para Roberto Olabe, actual director deportivo realista, con quien empezó su carrera y con el que ahora pone el broche a la misma, agradecimiento que ha hecho extensivo a su familia, compañeros y trabajadores del club presentes en su despedida, así como a la afición.

«He podido estar muchos años defendiendo la camiseta que he querido defender, ha sido una lucha anual para defender el escudo que quería defender y voy a acabar mi carrera defendiendo la camiseta y el escudo que quiero», ha comentado.

La temporada 2012-13 fue la mejor de su carrera profesional con 14 goles en Primera División, una cifra que iba camino de pulverizar cuando sufrió la grave lesión en diciembre de 2015, en un choque con el portero del Real Madrid Keylor Navas en el Santiago Bernabéu que al final ha sido determinante para, dos años y ocho meses después, colgar la camiseta txuri urdin.

«Estoy muy tranquilo porque, aunque yo me voy, veo el equipo preparado para seguir dando alegrías sin que esté yo», ha remarcado un Agirretxe que ha eludido polemizar sobre aquella entrada de guardameta costarricense, al que no guarda «rencor ni rabia» porque es un tema que está «más que zanjado».

«No me lleva a ningún sitio, la rabia no me vale para nada. Toda esa rabia que podía haber tenido la he cambiado por trabajo, por sacrificarme para volver a mi nivel», ha explicado.

Aunque ha marcado 75 goles en los 272 partidos oficiales que ha jugado con la Real, Agirretxe se queda con el tanto logrado en un amistoso de pretemporada como el más especial, el que anotó el pasado verano contra el Groningen, tras superar su lesión de tobillo.

El presidente de la Real ha anunciado que Agirretxe seguirá vinculado al club, aunque no ha concretado cuál será su tarea en el futuro.

Llegada de Sandro Ramírez

Aperribay ha revelado asimismo que la Real está «bastante cerca» de incorporar al atacante Sandro Ramírez, que llegaría desde el Everton inglés en calidad de cedido y sin opción de compra. El presidente de la Real ha negado que la llegada del ex del Barça vaya a suponer la salida de Jon Bautista.

También ha descartado el fichaje de otro jugador de corte ofensivo –se ha venido especulando durante todo el verano con la contratación de un extremo– y ha dejado la puerta abierta a un defensa central «cedido o en propiedad», tras la lesión de Diego Llorente.