En un videocomunicado, Carles Puigdemont ha afirmado que «Europa no puede ser cómplice con su silencio de este abuso», y ha argumentado que debe actuar porque se ha demostrado que en el Estado español se ha puesto en riesgo el Estado de derecho.
«El Estado en su conjunto, desde el Rey a la Fiscalía, continúan ejerciendo una venganza contra un Govern, un Parlament y una gran parte de la población que les dijo: así no, así no queremos continuar formando parte de este Estado», ha expuesto desde Waterloo.
Puigdemont ha defendido el carácter democrático y pacifista de todos los líderes procesados y ha asegurado que el proceso soberanista continuará pese a todo: «Continuaremos la lucha aún más determinados para todos los presos y presas y para todos los ciudadanos».
También ha pedido ayuda a todos «los demócratas del Estado español», y ha asegurado que la única violencia que habido en Catalunya es la de las cargas policiales de la Guardia Civil y la Policía española durante la jornada del referéndum del 1-O.