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El discurso de Urkullu solo satisface a los suyos

Tan solo el PNV ha valorado aplaudido el discurso de fin de año del lehendakari, Iñigo Urkullu, mientras que el resto de partidos representados en el Parlamento, cada cual con su matiz y su enfoque, han reaccionado con críticas.

Desde el principal partido de la oposición, el parlamentario de EH Bildu, Iker Casanova, ha pedido al lehendakari que aproveche el «microclima» al que Urkullu ha hecho alocución en su discurso para ¨desarrollar políticas decididas para liderar el país. Siempre que haya políticas que mejoren la vida de la gente podrá contar con EH Bildu, pero siempre desde el diálogo entre iguales».

Para Casanova, hasta ahora el lehendakari está «sometido y plegado a los intereses de la patronal Confebask y absolutamente enfrentado con todos los sindicatos».

Desde Elkarrekin Podemos, la parlamentaria Tinixara Guanche ha dicho que su partido coincide con los sentimientos de deseo de mejora que ha expresado el lehendakari, «pero diferimos en que eso implique el continuismo de un modelo que tiene unas limitaciones claras».

La formación morada ha matizado a Urkullu que el «microclima vasco» padece «sus propios nubarrones en forma de políticas de un gobierno que no protegen a la ciudadanía».

«El microclima de Urkullu cita la educación y la salud pero se olvida de que sus políticas nos hablan de educación concertada que segrega, de sanidad que privatiza servicios, de promover EPSV y no pensiones públicas y dignas. Tampoco habla de la precariedad laboral», ha enumerado.

Por el PP, la secretaria general del PP de la CAV, Amaya Fernández, ha reclamado al lehendakari «coherencia», porque Urkullu dice defender la política para resolver los problemas mientras pacta «un proyecto rupturista» con EH Bildu.

Fernández ha criticado que Urkullu haya hablado «de la necesidad de superar los efectos adversos de la crisis económica» mientras «lleva todo el año haciendo guiños al procés catalán» que ha puesto «palos en la rueda de la prosperidad económica de los catalanes».

La dirigente del PP ha considerado que «el PNV y el nacionalismo tienen una magnífica oportunidad este año 2019 para rectificar» y «abrir un proceso de reflexión que les lleve a darse cuenta» de que «la ciudadanía vasca es una sociedad plural».

Desde el PSE, socio de gobierno del PNV, su portavoz parlamentario, José Antonio Pastor, ha opinado que el 2018 ha confirmado el acierto de su partido al decidir formar parte del Gobierno de Lakua «y orientar la acción política en Euskadi para dar respuesta a los verdaderos intereses de la ciudadanía: el crecimiento económico y la creación de empleo de calidad».

El portavoz del PSE ha hecho un llamamiento a aparcar «cualquier tentación de desviarnos de ese camino recto con recetas del pasado imitando a Cataluña».

Por último, desde el PNV, su portavoz en el Parlamento, Joseba Egibar, ha destacado que Urkullu ha proyectado la necesidad de conseguir un «autogobierno pleno» que sea «más independiente y menos dependiente de instituciones que», a su juicio, «nada tienen que ver» con la «estrategia del pueblo vasco».