GARA
caracas/washington

Impasse en el 20 aniversario de la llegada de Hugo Chávez al poder

En vísperas del vigésimo aniversario de la llegada de Hugo Chávez al poder Venezuela vivía ayer un impasse en la tensa situación que atraviesa desde que Juan Guaidó se autoproclamara «presidente encargado» a la espera de que el chavismo y la oposición midan hoy sus fuerzas en las calles del país. John Bolton John Bolton descartó una intervención militar inminente en país caribeño y dijo que Nicolás Maduro se arriesga a acabar en Guantánamo.

Venezuela vivía ayer una relativa clama en el contexto de la tensión provocada por la autoproclamación de Juan Guaidó como «presidente encargado», aupado por EEUU, a la espera de las movilizaciones de hoy para reclamar la convocatoria de «elecciones libres», en el caso de la oposición, y para conmemorar el vigésimo aniversario de la llegada al poder de Hugo Chávez, por parte del Gobierno.

Ayer continuó el cruce de declaraciones entre Guaidó, que volvió a rechazar el diálogo, y el presidente, Nicolás Maduro, que instó a los efectivos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y de la Guardia Nacional Bolivariana a rechazar la amnistía planteada por el líder opositor, porque no son «delincuentes».

Intervención militar

Mientras los aliados latinoamericanos de EEUU seguían reconociendo oficialmente a Guaidó, desde Washington, John Bolton, asesor de Seguridad nacional de Donald Trump descartó una inminente intervención militar de EEUU, Brasil, Colombia o una combinación de los tres, aunque recordó que Trump mantiene «todas las opciones sobre la mesa». «Nuestro objetivo es una transición pacífica del poder. Por eso hemos estado imponiendo sanciones económicas, aumentando la presión política en todo el mundo», dijo.

También afirmó que Maduro debería retirarse a vivir a una «bonita playa lejos de Venezuela», y que de lo contrario se arriesga a acabar «en otra zona playera como la de Guantánamo», en territorio cubano ocupado por una base militar de EEUU con una prisión para sospechosos de «terrorismo».

El Kremlin acusó a EEUU de «esforzarse» por provocar un «cambio de orden constitucional» a través de Guaidó. Rusia y China ratificaron su apoyo al Gobierno de Maduro después de que el presidente de la Asamblea Nacional les advirtiera de que sus inversiones corren peligro con el actual Ejecutivo.

Sorpresa en la oposición

El líder opositor y dos veces candidato presidencial, Henrique Capriles, reveló que la mayoría de la oposición se oponía a la autoproclamación de Guaidó como «presidente encargado» al considerar que podía desencadenar una «confrontación política» y provocar el cierre de la Asamblea Nacional. Desconocían que lo fuera a hacer, por lo que muchos opositores se vieron sorprendidos por su acción y, más aún, dijo Capriles, por el respaldo internacional.

 

Las disensiones internas se mantienen en el seno de la UE

Las disensiones internas evidenciadas el jueves en el seno de la UE en torno al reconocimiento de Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela se mantienen después de que Italia y Austria insistieran ayer en que no lo harán, postura que comparten Grecia, Eslovaquia y Chipre. Luxemburgo reiteró la necesidad de sopesar «las consecuencias jurídicas» y Suecia descartó un reconocimiento expreso porque «se reconocen estados, no personas». Roma se reafirmó en que hacerlo iría contra el principio de no injerencia y pidió evitar cometer el mismo error que en Libia. La ministra austríaca de Exteriores, Karin Kneissel, rechazó su reconocimiento expreso por cuestiones legales y porque no reconoce gobiernos sino estados. Fuentes diplomáticas señalaron que Wallström planteó una fórmula de compromiso no un reconocimiento formal para aceptar a Guaidó, pero Italia la rechazó. Ayer Berlín repitió que su objetivo es «ayudar a aliviar la dramática situación» de su población, no promover un «cambio de régimen», mientras Madrid se abría a aportar la experiencia de la llamada Transición.GARA