Iñaki IRIONDO
GASTEIZ

Erkoreka dice que los desacuerdos en Memoria no afectan al Gobierno

El portavoz del Gobierno de Lakua, Josu Erkoreka, aseguró ayer que los desacuerdos constatados entre PNV y PSE en la Ponencia de Memoria y Convivencia «no van a incidir negativamente en la cohesión de los partidos que integran el Ejecutivo en lo que respecta al cumplimiento del programa que es nuestro cometido principal».

Los desacuerdos entre PNV y PSE en la redacción del documento de conclusiones de la Ponencia de Memoria y Convivencia no afectarán a la labor del Gobierno de coalición que conforman ambos partidos, según aseguró ayer el portavoz del Ejecutivo autonómico, Josu Erkoreka. Esas diferencias, que se habían llevado con mayor o menor discreción durante meses, tratando de desviar la atención hacia otros puntos, y que este diario adelantó el pasado 18 de diciembre, se hicieron ya indisimulables en la reunión de este lunes, hasta el punto de que se haya hablado de «bronca» entre los portavoces del grupo jeltzale y del Grupo Socialista.

El PSE reprocha al PNV que esté buscando un consenso que tendría un apoyo inferior en la Cámara al alcanzado en 2012 cuando la izquierda abertzale estaba ilegalizada y fuera del Parlamento. Sostiene que el documento de síntesis redactado por la jeltzale Ana Oregi, presidenta de la Ponencia, «prescinde de las cuestiones que entendemos fundamentales para poder entender y explicar el pasado terrorista».

«Comprendemos»

Preguntado por estas discrepancias entre los partidos que gobiernan en coalición y sus posibles repercusiones, el portavoz del Ejecutivo autonómico, Josu Erkoreka, puso como base que «todo el mundo era consciente de que avanzar en la Ponencia de Memoria y Convivencia y alcanzar acuerdos en el seno de la misma no era una tarea fácil, que el trabajo iba a ser arduo e iba a encontrarse dificultades en el camino».

El portavoz subrayó que «desde el Gobierno, por supuesto, entendemos las diferencias que existen entre grupos parlamentarios y respetamos su trabajo», que Erkoreka explicó que «tiene tras de sí un esfuerzo importante de búsqueda de acuerdos, de aproximación de posiciones, que no se puede ignorar ni despreciar por el hecho de que en un momento determinado se pongan de manifiesto las diferencias y los antagonismos».

En opinión del Gobierno de coalición, «se trata de encontrar las palabras adecuadas y el momento idóneo para que al unísono y de una manera clara y contundente se pueda decir que los derechos humanos y el pluralismo político siempre tenían que haber sido respetados». Erkoreka incidió en el «siempre. Sin excepciones de tiempo, lugar y condición. Siempre tenía que haber sido así».

A partir de ahí, el portavoz expresó que «el Gobierno confía en que el trabajo desarrollado hasta la fecha no quede en agua de borrajas y sea posible que arroje frutos en los próximos meses».

«Momento preelectoral»

A las dificultades propias de la materia que se aborda en la Ponencia, Josu Erkoreka manifestó que «entendemos también que este momento preelectoral no es el idóneo, no es el mejor para alcanzar acuerdos».

En todo caso, quiso dejar claro que «por supuesto que el Gobierno va a seguir trabajando, desde la máxima cohesión, en el cumplimiento de su programa. Las diferencias entre grupos parlamentarios en el seno de la Cámara «no van a incidir negativamente en la cohesión de los partidos que integran el Ejecutivo en lo que respecta al cumplimiento del programa que es nuestro cometido principal».

Hasta la fecha, PNV y PSE han tenido desavenencias públicas por el informe sobre torturas que Lehendakaritza encargó al equipo encabezado por el forense Paco Etxebarria, y también con el programa Herenegun, que el Ejecutivo ha tenido que reconsiderar. Junto a ello, todo lo relativo al autogobierno, y entre ello la redacción del Nuevo Estatus, está fuera del pacto de coalición.

 

Arriola: «Reconducir las diferencias es responsabilidad de todos»

Después de que en la reunión de la Ponencia de Memoria y Convivencia se evidenciaran las diferencias que mantienen en este ámbito el PNV y el PSE, socios de gobierno en el Ejecutivo autonómico y en el resto de las principales instituciones de la CAV, el consejero de Vivienda, Iñaki Arriola, declaró ayer a los periodistas que «reconducir» esas diferencias «es responsabilidad de todos».

El máximo exponente del PSE en el Gobierno de Urkullu añadió que «flaco favor hacemos a la convivencia futura si no partimos de esa base sólida que permita que podamos convivir juntos en paz, reconociendo lo que estuvo mal para que no se repita».

Iñaki Arriola dijo coincidir con lo expresado la víspera por el lehendakari y con su deseo de que la Ponencia logre «avances», aunque advirtió de que el hecho de que EH Bildu «no sea capaz» de decir que la actividad de ETA «estuvo mal» hace un «flaco favor» a la labor de este foro y a la convivencia. El PSE sostiene que el PNV no es suficientemente exigente al respecto. GARA