Beñat ZALDUA
DONOSTIA
Entrevista
JOSEBA AGIRRETXEA
CABEZA DE LISTA DEL PNV EN GIPUZKOA

«Las oportunidades se abren por voluntad o necesidad, en cualquier caso el PNV estará»

Joseba Agirretxea (Ondarroa, 1966) lleva poco más que una década como diputado en Madrid, pero esta es su quinta campaña electoral para el Congreso de los Diputados, síntoma de una inestabilidad estatal en la que el PNV trata de seguir surfeando.

Dicen las encuestas que la lucha en Gipuzkoa está entre el PNV y EH Bildu, pero históricamente el PSOE ha cosechado buenos resultados cuando las posiciones en el Estado son muy polarizadas. ¿Cómo afrontan estas elecciones?

En este momento el PNV es la primera fuerza en Gipuzkoa. Al mismo tiempo, no tenemos ninguna duda de que el partido que representa al mundo de la izquierda abertzale, EH Bildu, es un movimiento potente, que está cerca de nosotros, siempre ha estado. Y el Partido Socialista también es una realidad que en las generales se activa. Pero por mucha fuerza que pueda tener, en sus prioridades no sé en qué número está Euskadi.

¿El PNV está dispuesto a pactar con PP y Ciudadanos, como en la anterior legislatura? ¿O la radicalización de la derecha lo hace imposible?

Podríamos hacer una segunda pregunta a la inversa: ¿Ve usted al PP y a Vox pactando con el actual PNV?

Pero yo tengo delante al candidato del PNV....

Evidentemente, si es real lo que dicen que son y lo que dicen que van a hacer, es obvio que ahí no hay nada que hacer. Nosotros vamos a apostar por quien facilite, por quien beneficie, por quien se acuerde de o por quien esté dispuesto a contribuir en el autogobierno vasco, por quien esté dispuesto a asumir la responsabilidad que el Estado tiene en la transferencia de ciertas competencias, por quien esté dispuesto a asumir el autogobierno en su plenitud, el que esté dispuesto a plantear una negociación de un nuevo estatus si así surge desde el Parlamento Vasco. Pero si son [las derechas] lo que dicen ahora que son, pues va a ser muy complicado, por no decir imposible.

Por como lo expresa, ¿no acaba de creer que las derechas son lo que dicen ser?

Sí me lo creo, pero cuando ellos necesiten, en un momento dado, de cierta situación, pueden incluso cambiar de política si les interesa. Pero de que son lo que dicen que son, no tengo ninguna duda.

¿Qué consecuencias tendría para Euskal Herria la suma de las tres derechas en el Gobierno?

Incluso si sumasen matemáticamente, ahí hay mucho gallo en el mismo corral. Pueden tener un criterio unánime en contra de qué quieren ir, pero después va a ser complicado. Habrá que mirar qué capacidad hay para evitarlo, porque si los números les dan y hacen lo que dicen que van a hacer, se va a dar una situación muy complicada para el autogobierno y para todo tipo de políticas sociales que se hayan podido plantear. Si eso es así, nos tendrán enfrente.

Dada su polivalencia, los votos del PNV pueden acabar siendo claves para decantar la balanza hacia un Gobierno PSOE-Cs o hacia otra cosa más progresista con PSOE, Podemos y los independentismos. ¿En base a qué decidirá el PNV?

No me voy a adelantar porque no sé qué va a pasar, pero una entente PSOE-Ciudadanos anula casi desde un principio la posibilidad del Partido Nacionalista Vasco, porque la opción de Ciudadanos anula automáticamente cualquier atisbo de defensa del autogobierno, del Estatuto y de lo que pudiera venir, no hablemos ya del derecho a decidir, autodeterminación, etc. Ante una tesitura así, habremos de plantear: ¿ustedes qué quieren de nosotros? Para retroceder evidentemente no estaremos. Estaremos con quien esté dispuesto a avanzar.

Entiendo, por tanto, que prefieren un PSOE con Podemos y los partidos independentistas.

No voy a entrar en lo que vamos a hacer luego porque no lo sé. Yo prefiero al PNV.

Reformulo. ¿Con qué tipo de alianzas cree más posible que el PNV puede lograr los objetivos con los que se presenta a las elecciones? ¿No sería con un pacto de las izquierdas?

Sobre un tapete en crudo, evidentemente sí. Ahora bien, ¿con qué actitud? ¿Con un PSOE recentralizador o un PSOE abierto a aceptar la plurinacionalidad? Quien quiera contar con el PNV, ya sabe lo que el PNV piensa.

En la presentación de la campaña, Aitor Esteban señalaba que, pese a los nubarrones, podrían abrirse ventanas de oportunidad. ¿Cuáles son?

Las ventanas pueden ser voluntarias, que es como nos gustaría que fueran, o pueden surgir por necesidad. Es decir, me faltan X votos y, aunque no es mi voluntad, estoy necesitado de X para conseguir no sé qué. Cualquiera de las dos ventanas puede surgir, aunque aquí, desde una perspectiva de voluntariedad, en el Estado español ningún Gobierno se ha comprometido nunca voluntariamente ni a profundizar el autogobierno ni a transferir nada. Todo ha sido porque lo han necesitado y se le ha tenido que arrancar. El PNV... la palabra aprovechar no me parece justa, porque no es aprovechar, pero sí ha sido responsable de que eso ocurriera en esos momentos. Y lo seguirá siendo.

Si esas ventanas son siempre forzadas por urgencias de la parte española, ¿puede hablarse de bilateralidad?

Si fueran voluntarias sería bilateralidad. Hay cosas sobre el PNV que no hay ni que cuestionar: somos un pueblo, una nación que tiene derecho a decidir su futuro. Y no tengo ninguna duda, y mi partido tampoco, de que esto se soluciona votando. Algún día tendremos que votar en Catalunya y en Euskadi qué queremos ser, dónde queremos estar y en qué condiciones. Pero mientras ¿qué hacemos? Porque es muy fácil hablar de la meta, pero ¿y el camino? En estos momentos hay ciertas cuestiones que habrá que ir solucionando y va a costar más o menos según quién esté. Por tanto, la bilateralidad es precisamente lo que pedimos, una relación de tú a tú para decidir cómo nos queremos entender.

Sin ánimo de polemizar, ¿esto es posible en una relación donde una de las partes tiene un Estado en sus manos?

Mientras sigas siendo miembro de un Estado y no se te reconozca oficialmente... el desarrollo pleno del autogobierno nos daría esa bilateralidad. Pero en estos momentos sí, uno tiene más porque tiene la capacidad de no cumplir la ley. Y no pasa nada. Eso es injusto y debe ser denunciado. Por lo tanto las debilidades son las que son y el Estado es lo que es. ¿Pero acaso estaríamos mejor en otra tesitura? El autogobierno ha permitido que podamos estar mínimamente ahí. ¿Que queremos más? Claro que sí, pero será muy difícil aspirar a más sin defender lo que tenemos.

¿Cree que por una de esas ventanas podría colarse el nuevo estatus a lo largo de la próxima legislatura?

Creo que el nuevo estatus es un trabajo que le corresponde al Parlamento Vasco. Los partidos que acordaron unas bases están comprometidos, y después hay un grupo de expertos, aunque algunos más parecen expertos en zancadillear. En cualquier caso, vamos a dejar que trabajen. A mi me gustaría que lo que fuere, fuere con el mayor consenso posible, y que a nosotros nos otorgara una herramienta para poder defenderlo en Madrid con uñas, dientes, convicción, y con cuanta mayor unidad, mejor.

 

«Guk ez dugu inoiz arazorik izan inorekin hitz egiteko eta, adostu behar bada, adosteko»

EH Bilduri urteetan eskatu zaio orain jorratzen ari den bidea jorratzeko, eta orain, berriz, fidagarritasun falta eta sinesgarritasunik eza leporatzen zaio. Ironia apur batekin, «via crucis»-aren zenbatgarren gurutzean esanen zenuke dagoela ezker abertzalea?

Nik ez dut kritikatuko bide hori egitea, oso ondo iruditzen zait, eta zenbat eta gehiagok egin, hobeto. Baina politika egiteko ere umila izan behar da, eta umiltasunak exijitzen duena da hau esatea: ‘Bide hau egin zutenek asmatu zuten eta beste batzuek eraman zuten bide hori okerreko bidea zen’. Eta horregatik esan behar zaie: eskerrik asko guri arrazoia emateagatik. Ironia puntua nahi baduzu, nik ere jarriko dizut.

EH Bilduk Madrileko partida jokatzea eta Estatuan erabakigarria izatearen aldeko apustua egitea erabaki du. Behin Madrilen, Euskal Herriko alderdien artean gutxieneko elkarlan bat posible ikusten al duzu?

Ezker abertzaleak hori esaten badu, esaten ari da orain arte ez duela egin. Orain egiteko prest badago, oso ongi, herriak eskertuko du. Hori esanda, kontua ez da zeintzuk jarri behar diren ados, baizik eta zertarako. Ikusi beharko da mahai gainean zer jartzen dugun, zer daukagun batera defenditzeko eta zer gauden prest batera defenditzeko. Prest baldin badago, hitz egitea izango da kontua. Printzipioz, guk ez dugu inoiz arazorik izan inorekin hitz egiteko eta, adostu behar bada, adosteko. Ikusi beharko duguna da zer eta zertarako, hori bai.