Nueva noche electoral de infarto por un quinto escaño peleado entre EH Bildu y PSN hasta el final. Al 99% el asiento se decantó por el PSN. Fue un diputado carísimo. Bel Pozueta hizo que EH Bildu subiera de un 9,36% del voto total hasta el 12,85%, pero no bastó. En líneas generales, Navarra Suma ganó, aunque dejándose una cuarta parte de los votantes. Esto dejó a la coalición muy cerca del PSOE, que fue el verdadero triunfador de los comicios. La foto definitiva la cerraba la número 3 de Podemos a nivel estatal, Ione Belarra. Los morados pierden un escaño, sufriendo una fuga de votos muy similar a la subida obtenida por el PSN, pero mantienen con holgura el de Belarra. En resumen: los cinco escaños acabaron en partidos de ámbito estatal.
Navarra Suma debiera haber aspirado a tres escaños, pero la sangría de votos le dejó muy lejos. No importa. El verdadero motivo de la coalición de las derechas era esquivar el veto que había lanzado el PSN al PP de cara a las forales. La posibilidad de un acuerdo en Madrid entre Ciudadanos y el PSOE reabre el camino a un entendimiento entre Navarra Suma y el PSN. Es decir, la reedición del Régimen.
Este escenario, aun con todo, tiene un problema: la aparición de Vox. Los de Santiago Abascal han obtenido un resultado modesto en Nafarroa, al menos, comparativamente con lo ocurrido en otros puntos del Estado. Sin embargo, han sobrepasado holgadamente la barrera del 3% (se quedaron en el 4,8%), lo que les augura una entrada en el próximo Parlamento foral. Esto dificultará, de un lado, que Navarra Suma apele al voto útil. Y, del otro, si los escaños de Vox finalmente son necesarios, podrían echar al traste un entendimiento con el PSN.
La foto que dejan estas elecciones resulta difícil de interpretar. El partido de la actual lehendakari sacó un resultado residual, apenas el 6% de los votos. Sin embargo, el tirón de Uxue Barkos a buen seguro cambiará este resultado.
Habrá que esperar a ver cómo se digieren estos resultados de aquí al 26 de mayo.
El experimento de Aldaketa al Senado sigue sin funcionar como debe
El recuento de las votaciones al Senado iba muy retrasado en Nafarroa. Aún así, aparentemente, la moneda cae del lado de Navarra Suma, que vuelve a conseguir los tres asientos de su papeleta. Y el cuarto se lo llevaba el PSOE para Antonio Magdaleno. Puede que el nombre de la coalición entre los partidos del cambio no fuera suficientemente conocido, pero también son evidentes las diferencias de voto entre los distintos nombres de la terna. El porcentaje de voto sumado de las formaciones debería haber hecho que Aldaketa ganara los tres de calle, pero algo lo impidió.