Sare ha denunciado que, a pesar de su delicado estado de salud, Txus Martín sigue estando en prisión y continúa sufriendo «las medidas de excepción que se les aplica a los y las presas vascas».

Esta plataforma ha recordado que «los presos gravemente enfermos que reciben su tratamiento en condiciones dignas, con el apoyo de sus familiares y en sus hogares, tienen más posibilidades de hacer frente a sus enfermedades», y ha lamentado que Txus Martín no esté contando con esta posibilidad, por lo que ha reclamado que que se le aseguren las «condiciones dignas y la tranquilidad y el apoyo familiar que cualquier enfermo necesita ante una operación».

Ertzainas en el hospital

Sortu también ha denunciado la actuación de la Ertzaintza y ha exigido que «Txus Martín pueda gozar del permiso extraordinario en los terminos dictados por el juez, sin ningún tipo de presión ni presencia policial cercana».

Ha narrado que «seis ertzainas lo trasladaron esposado de la cárcel de Zaballa al Hospital de Txagorritxu. Durante toda la tarde fueron cinco los ertzainas que permanecieron en la habitación hospitalaria y solo dejaron entrar a dos familiares». No les dejaron quedarse por la noche e incluso este martes, en la zona donde se ha realizado la operación, había «un ertzaina vestido con bata de quirófano».

LAB ha añadido que «hemos intentado hablar con el gerente del hospital, pero este no ha querido hacer nada ante esta situación de vulneración de derechos. Desde LAB queremos dejar claro que la salud es un derecho universal, también para las personas presas». El sindicato ha anunciado que ha pedido una reunión de urgencia con la consejera de Salud del Gobierno de Lakua, Nekane Murga.