A lo tonto a lo tonto, la pelea por la primera plaza de la Liga ACB se ha puesto bonita. Por ejemplo, el Real Madrid ha conseguido empatar a 23 triunfos con el Barça, mientras que Kirolbet Baskonia se ha echado encima de los dos conjuntos futboleros después de imponerse en el Palau Blaugrana por 72-84. A partir del descanso, los gasteiztarras se han impuesto gracias a su dominio del juego interior, con un resultado que además ha traído premio, ya que los de Perasovic se han llevado el basket average, ya que el resultado de Zurbano fue de 73-82.

El encuentro ha empezado de forma suave entre dos equipos con mucha carga de partidos y viajes por Europa. En ese sentido, ha sido gratificante poder ver a Vildoza jugar desde el salto inicial, mientras que en el bando culé se ha ausentado Tomic. Les ha costado entrar en temperatura a los dos equipos, siendo los aleros Hanga y Shields los encargados de meter las primeras canastas. Sin que el Baskonia haya perdido pie, los de Perasovic han tenido que ir a remolque de un Barça que ha vivido su partido en un Palau lejos del lleno a cuenta del mal tiempo que ha reinado en Barcelona.

Durante el primer tiempo el Baskonia ha sufrido a la hora de cerrar el rebote, pero ha sabido parar cada golpe del Barcelona, que ha tenido siete puntos de renta en el segundo cuarto, aunque el marcador al descanso ha sido de 34-32, y eso que los gasteiztarras han estado muy desacertados desde los 6,75 metros.

Los gasteiztarras, después del descanso, han sabido apretar atrás, sabedores de que el Barça tenía que empezar a sufrir su trajín de partidos y traslados. En ese sentido, Tornike Shengelia ha sido un baluarte más que útil, al punto de darle al Baskonia un empujón con el que se han despegado de su rival en el marcador; un parcial de 2-11 ha supuesto pasar del 47-44 al 49-55, con Hilliard, muy fallón en la primera mitad, sumándose a la causa con cinco puntos seguidos, obligando a Svetislav Pesic a pedir tiempo muerto, aunque lo único que ha conseguido es que el partido haya entrado con 51-57 en el último período.

Kirolbet Baskonia ha llegado a irse por diez puntos, fruto de la superioridad en la pintura de un Poirier que en las últimas fechas no encuentra a nadie que lo pare. El Palau Blaugrana solo ha despertado entonces, forzando así algo parecido a una reacción de la mano de Kevin Pangos y Oriola. No obstante, el conjunto baskonista no se ha dejado achantar, con Poirier, Hilliard, Shengelia y Shields aportando granitos de arena que han servido para que su ventaja no se viniera abajo, al tiempo que el Barça ha desperdiciado un sinfín de tiros libres, con lo que la victoria ha comenzado a verse cada vez más cerca en el horizonte.

Una falta antideportiva de Singleton sobre Voigtmann ha supuesto la puntilla para el Barça. Hasta entonces, los gasteiztarras parecían conformes con ganar, que no es poco, en el Palau. Pero desde ese momento los de Perasovic han ido a degüello a por el basket average. Ha sido Darrun Hilliard quien ha anotado el 71-81, y en adelante, pese a una antideportiva del propio Hilliard sobre Heurtel, convertido en el único recurso culé en los minutos finales, Kirolbet Baskonia se ha hecho acreedor del premio gordo, lo cual le da sal y pimienta a las últimas jornadas de la Liga Regular de la ACB.

[Estadísticas del partido]

Xabier Añua, homenajeado en el Palau

Si ha habido algún protagonista en esta jornada de baloncesto, ese ha sido el gran Xabier Añua. El Barcelona ha homenajeado en el descanso del partido al viejo entrenador en el 50º aniversario de su llegada a Can Barça, allá por 1968, siendo el gasteiztarra uno de los más influyentes impulsores del basket en la capital catalana. Añua, que como ha recordado «yo inauguré el Palau Blaugrana» se ha mostrado emocionado y lleno de gratitud, al borde de las lágrimas. El Barça, representado por la plantilla que el propio Añua entrenó hacia finales de los años 60 –aunque con la ausencia de Aíto García Reneses, que llegó al Barça en calidad de jugador por orden expreso de Xabier Añua–, ha agasajado al veterano entrenador con una camiseta con el dorsal número 50. El Palau Blaugrana al completo, sus escasos 4.577 espectadores reunidos, han ovacionado al gasteiztarra puestos en pie.

Un gran favor del Real Madrid a Delteco Gipuzkoa Basket

En la víspera del partido del Palau, el Real Madrid se imponía a UCAM Murcia por 80-82, un resultado que supone un gran favor para Delteco Gipuzkoa Basket, que a su vez se prepara para jugar un encuentro vital en la cancha del conjunto pimentonero, que empata con los donostiarras en el pozo clasificatoria, con un balance de 9-20.

«Otro partido súper importante. Somos conscientes de que será un partido muy duro, pero sabemos que para mantenernos en la Liga ACB hay que hacer algo extra», ha respondido a este respecto el técnico de Gipuzkoa Basket Sergio Valdeolmillos, en su alocución semanal.

«Hace muchos meses, llegar a este partido en esta situación nadie la hubiera considerado llegar en una mala situación. Pero para ganar en Murcia necesitaremos esa exigencia mental que nos faltó en Manresa. Tenemos que esperar que las cosas no serán fáciles en todo momento, tendremos que dar una vuelta de tuerca más a nivel mental porque nos vamos a encontrar con un equipo defensivamente sólido y tendremos que tener paciencia para buscar soluciones a lo largo del partido. Tendremos que estar muy preparados para esos altibajos y esas rachas que tiene el Murcia y para el nivel físico que nos van a imponer. Más que nunca, tenemos que hacer prevalecer la suma de todos y el desarrollo de la defensa y el ataque colectivos», ha señalado el técnico nazarí.

Olympiacos, ¿a Segunda División? ¿O a la Liga Adriática?

Las quejas arbitrales en la Liga Griega pueden llegar a suponer un castigo a Olympiacos que pudiera llevar a la escuadra del Pireo a la Segunda División de su país. El próximo miércoles los «rojos» de Atenas se enfrentan en la última jornada de la Liga Regular frente al Promitheas Patron, pero como entre los árbitros, uno de los elegidos es Panagiotis Anastopoulos –uno de los tres colegiados vetados por Olympiacos–, podría suponer la derrota por incomparecencia. Si se produce esta circunstancia, se anularán todos los resultados de la escuadra del Pireo, por lo que supondría su descenso a la Segunda División.

Al entender que el arbitraje de Anastopoulos, Manos y Panagiotou favorecía a Panathinaikos, Olympiacos se retiró en el descanso de la semifinal de la Copa Helena, vetando de paso a estos tres colegiados para el resto de sus partidos, al tiempo que exigió árbitros extranjeros exclusivamente para sus próximos partidos ante el PAO, negándose a jugar de otro modo. El Comité de Arbitraje ha evitado llamar a los citados colegiados en los partidos de los del Pireo, hasta que ha llegado la protesta formal del presidente de Panathinaikos, Dmitris Giannakopoulos, quejoso de que el estamento arbitral «se pliega a las órdenes» de Olympiacos.

A falta de lo que suceda el miércoles, lo cierto es que permanecer en la máxima categoría es una exigencia ineludible para estos equipos que juegan la Euroliga, al menos de momento. Por ende, Olympiacos, tiene en mente inscribir su nombre en la Liga Adriática –la ABA Liga–, competición de la que forman parte equipos de las naciones que formaban la antigua Yugoslavia, para no perder su condición de equipo con Licencia A para participar en la Euroliga. El dislate, empero, no tiene visos de terminar ahí, ya que el propio Panathinaikos ha avanzado en alguna ocasión que, si los vecinos del Pireo se marchan a la Liga Adriática, ellos harán lo propio.