Según señala el Ejecutivo foral en una nota, un ganadero del Valle de Roncal se ha puesto en contacto esta mañana con el Guarderío de Medio Ambiente del Gobierno de Navarra porque ha encontrado dos ovejas muertas en el término municipal de Uztarroze.
Los guardas desplazados han inspeccionado las ovejas y en una de ellas han encontrado heridas compatibles con un ataque de oso pardo, aunque no han encontrado huellas en los alrededores al tratarse de una zona muy herbosa, y la segunda oveja habría sido comida por los buitres.
A la espera de los últimos análisis técnicos a partir de la información recabada por los guardas de medio ambiente y del contraste con las coordenadas facilitadas por las autoridades francesas «parece probable» que se trate de un nuevo ataque de la osa Claverina.
Mañana lunes, está previsto que se reúna el grupo de seguimiento del Plan de Acción del Oso Pardo del Departamento de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local.