¿Qué balance hace de esta legisatura municipal, marcada por un cambio de Alcaldía y de formas de gobernar?
Para nosotros, el balance es negativo. Tenemos la percepción de que este gobierno municipal ha gobernado fundamentalmente para las personas que opinan como ellos. No ha sido un gobierno dirigido a toda la ciudadanía, sino a las personas de su ideología. Se ha centrado demasiado en cuestiones identitarias, lingüísticas, frentistas. Ha habido una crispación en ese sentido. Ha habido también una dejación importante en el tema de las ocupaciones. Por eso, nuestro balance es negativo en su conjunto.

En cualquier caso, en el último Pleno sí que hubo un acuerdo con el equipo de gobierno para que el PSN votara a favor de inversiones sociales.
Es que no es justo decir que todo ha sido malo. Me gusta ser rigurosa. Sí que valoramos aspectos positivos. No solamente ha habido acuerdo en el último Pleno. Parece que eso ha llamado un poquito más la atención, pero nosotros en inversiones financieramente sostenibles ya pactamos anteriormente también. En estas últimas hemos pactado porque hemos comprobado que las anteriores que habíamos acordado se estaban realizando y algunas estaban ya incluso concluidas. Es algo que nos ha satisfecho y por eso hemos vuelto a pactar una nueva partida de inversiones. Resulta muy difícil votar en contra de inversiones que son buenas para la ciudad, como vivienda, mobiliario, asfaltado, mejoras en colegios, ... Coincidimos con la mayoría de inversiones propuestas por el equipo de gobierno. Además, nos admitieron todas las enmiendas que presentamos nosotros. Lógicamente, las aprobamos. Pero ya le digo que no solamente hemos coincidido en este tema, hemos coincidido en muchísimos temas con el equipo de gobierno. La oposición que hemos hecho ha sido constructiva. Hemos votado a favor de todo lo que considerábamos bueno, como la ordenanza de vivienda o el reglamento de la Policía Municipal. Pero eso no quita que haya cosas que se han dirigido solo a una parte de la ciudadanía. Son las que criticamos.

De todos modos, el PSN sí que se ha marcado como línea roja no acordar con EH Bildu un pacto global.
Efectivamente. Nuestro concepto de comunidad y de símbolos es el opuesto al de EH Bildu. Coincidimos en aspectos sociales, pero no en cuestiones éticas profundas. Por ejemplo, no podíamos hacer un pacto de gobierno con partidos políticos que a día de hoy no han condenado los asesinatos de ETA. Para nosotros es algo que es insalvable. Pero más allá de estos asuntos, hay cuestiones en las que coincidimos y en el día a día del Ayuntamiento entendemos que tiene que ser así.

Existe una percepción social de que el PSN ha estado alineado con UPN a la hora de hacer oposición al equipo de gobierno.
¿Sabe qué pasa? Que en cuestiones importantes, institucionales, ideológicas e identitarias, hemos coincidido con UPN. Quizás se le está dando más cancha de la que debería tener porque también hemos coindicido con el equipo de gobierno. Hay cuestiones en las que la oposición, lógicamente, hemos coincidido. Pero es que tampoco se nos ha dado demasiada cancha. Cuando el equipo de gobierno era el cuatripartito, todas nuestras iniciativas iban directamente a la basura. En ese sentido, nosotros no hemos cambiado. Hemos presentado iniciativas desde el inicio de la legislatura. Pero ha sido ahora, después de que Asiron expulsase a I-E y Aranzadi del equipo de gobierno y al no tener los votos necesarios, cuando han atendido nuestras solicitudes.

De cara al día despúes de las elecciones, se percibe que puede que no haya una mayoría clara. En ese escenario, ¿el PSN se plantea oscilar la balanza hacia una alcaldía de Joseba Asiron o hacia una de Enrique Maya?
Estamos dispuestos a que Pamplona tenga un gobierno municipal progresista, de izquierdas, que atienda a los verdaderos problemas de la ciudadanía y que se aleje de las políticas frentistas e identitarias. No puedo hablar ahora de qué se va a hacer y qué no se va a hacer porque no tenemos los resultados exactos de las elecciones. Decir cómo va a ser el futuro sería una hipótesis en la que no me puedo posicionar. En cualquier caso, trabajaremos sobre nuestro programa si es que al final hay que llegar a acuerdos. Siempre se nos pregunta a quién vamos a dar los votos, pero también estamos dispuestos a recibirlos. El PSN se presenta para hacer gobierno. Nos presentamos para alcanzar la Alcaldía. Trabajaremos sobre nuestro programa. Quienes coincidan con nuestro programa tendrán más posibilidades de alcanzar acuerdos.

La fórmula Navarra Suma, con PP y Ciudadanos, con la que se presenta Enrique Maya no parece que coincida con el programa del PSN.
Con UPN se plantea una dificultad extraordinaria. Fueron a Colón a manifestarse junto a Vox contra Pedro Sánchez. En la coalición Navarra Suma se han juntado con el PP y Ciudadanos, que van en contra de los fueros de Navarra, que es la especificidad que UPN no debería haber perdido. Eso nos dificulta para alcanzar pactos en el futuro. Pero insisto en que si tenemos que llegar a acuerdos será en base a programa, programa, programa.

También existe una percepción de que el PSN es un obstáculo para la normalización del euskara.
Esa percepción es errónea. El PSN siempre ha estado en todas las iniciativas que se han hecho en relación al euskara. Quiero recordar que la ordenanza del euskara que ha estado vigente hasta hace poco fue iniciativa del PSN. Como las leyes que se han hecho en el Parlamento de Navarra, en las que el PSN siempre ha estado o llevando la iniciativa o votando a favor. Quiero dejar claro que el PSN está en contra de la exigencia del euskara para el acceso a los puestos de trabajo. Sobre todo, cuando no están en relación directa con la ciudadanía. Entendemos que en estos casos se pueda exigir para cumplir el derecho de la ciudadanía a dirigirse a la Administració en euskara. No vamos a ser un muro frente al euskara. Queremos construir puente que permitan que el euskara fluya, pero no utilizándolo como un arma política.

Una cuestión más ligera. En otras campañas, hemos visto a Maite Esporrín haciendo yoga o zumba. Este año todavía no. ¿Tendremos alguna sorpresa?
Estamos a principio de campaña todavía. Estamos pensando en alguna cuestión que tenemos que madurar todavía. La verdad es que nos han surgido dificultades con la climatología. Creo que la política tiene que trasladar lo que es la persona. Soy una persona activa, que me muevo en el mundo del deporte. La calle tiene que ser donde se reúna la ciudadanía. Y tiene que ser para ocio y disfrute de la ciudadanía.