Olano ha sido designado para un nuevo mandato de cuatro años con el apoyo de los 20 junteros del PNV y de los 9 procuradores del PSE, que en conjunto suman mayoría absoluta en el Parlamento foral, mientras que los 17 apoderados de EH Bildu han votado a su aspirante, Juan Karlos Izagirre, y los cuatro de Elkarrekin Podemos y el único del PP han votado en blanco.

La reelección de Olano ha tenido lugar en un maratoniano pleno de investidura del diputado general, celebrado en sesiones de mañana y tarde en la Juntas Generales de Gipuzkoa, un mes después de las elecciones forales del pasado 26 de mayo.

Durante su intervención ante las JJGG, Markel Olano, quien afrontará su tercer mandato al frente de la Diputación (segundo consecutivo), ha intercalado un mensaje político con otro de carácter más institucional, al asegurar que no habrá una «verdadera consolidación democrática en Euskadi» sin lograr un acuerdo sobre la «institucionalización del derecho a decidir».

De forma paralela, se ha comprometido a crear 10.000 empleos en la legislatura y 500 plazas residenciales con la construcción de cuatro nuevos centros y la ampliación de otros tantos, así como a invertir 20 millones anuales en los proyectos estratégicos enmarcados en la estrategia foral de desarrollo del territorio Etorkizuna Eraikiz.

Asimismo, se ha marcado como principales retos de su legislatura el fomento del empleo de calidad y la economía competitiva del futuro, el reforzamiento del sistema de protección y de justicia social y la transformación de la Diputación foral.

En el ámbito económico, ha avanzado que seguirá «al lado de las empresas» y que fomentará el talento, la conciliación, la participación de los trabajadores, la investigación, la digitalización y la mejora de la calidad del empleo.

Ha anunciado además la puesta en marcha de un Plan para la Nueva Economía y el impulso del plan de inclusión socio laboral Elkar Ekin a través de los cuales el Gobierno foral apoyará la creación de 10.000 nuevos empleos, casi la mitad de ellos para personas en exclusión o en riesgo de estarlo.

Su socio de gobierno, Denis Itxaso, ha recalcado que la coalición PNV-PSE «no es un objetivo en sí mismo» sino «un instrumento» porque, según ha comentado, «el verdadero objetivo es la convivencia entre los diferentes» y su «fin último es la gestión de la complejidad de las sociedades modernas».

Itxaso ha reivindicado además la configuración en Gipuzkoa de un Gobierno desde «el coliderazgo» de un proyecto plural, que «incluya y respete distintas sensibilidades y sentimientos de pertenencia, poniendo por delante el interés» del herrialde.

Discurso «autocomplaciente»

El representante de EH Bildu, Juan Karlos Izagirre, ha tachado de «autocomplaciente» el discurso de Markel Olano, al tiempo que ha reivindicado el «modelo alternativo» que, a su juicio, encarna su coalición para «construir una sociedad más justa» con un reparto adecuado de la «riqueza».

Izagirre ha reivindicado la restauración en Gipuzkoa del impuesto sobre la riqueza y las grandes fortunas e implantar «políticas fiscales sin escudo que tengan en cuenta la participación de las empresas».

Asimismo, ha destacado la necesidad de introducir modificaciones en el impuesto de sociedades y reforzar la lucha contra el fraude fiscal, además de reclamar unas «condiciones de trabajo y unas jubilaciones dignas».

Por su parte, la portavoz de Elkarrekin Podemos, María Valiente, ha criticado el discurso de Olano que, en su opinión, le asemeja al «director general de una multinacional», mientras que el juntero del PP, Juan Carlos Cano, ha justificado su decisión de no respaldar la investidura de Olano por sus «políticas acomodadas».

Tras este pleno de investidura, está previsto que las Juntas Generales de Gipuzkoa celebren una nueva reunión plenaria en Hondarribia, donde el próximo 2 de julio tendrá lugar la sesión «itinerante» que el Parlamento foral rota anualmente por distintas localidades del herrialde.