Ibai Azparren

Ultreia, una oportunidad para ensanchar el camino

Ultreia es un centro de interpretación del Camino de Santiago que incorpora una serie de elementos que ayudan a las personas con discapacidad a adentrarse tanto en la historia de este como en la de Iruñea.

El área de experiencia, un juego de espejos audivisuales en el que se relata la historia del Camino de Santiago. (Jagoba MANTEROLA/FOKU)
El área de experiencia, un juego de espejos audivisuales en el que se relata la historia del Camino de Santiago. (Jagoba MANTEROLA/FOKU)

Si el lector de este artículo está familiarizado con el Camino de Santiago o ha vivido la experiencia de recorrerlo, quizá reconozca la expresión «Ultreia», una forma de saludo entre los peregrinos más curtidos en las rutas jacobeas. «Ultreia» es una forma de ánimo entre los peregrinos, y viene a significar «adelante, ve más allá», saludo que se contesta con la expresión «et suseia», cuyo significado es «vamos más arriba». Recogida en el Códice Calixtino (Codex Calixtinus), considerado la primera y más célebre guía del Camino de Santiago, comenzó a usarse tras la publicación de esta joya manuscrita del siglo XII.

Puesto que este saludo se realciona con diversos aspectos relacionados con la filosofia y la finalidad del Camino de Santiago, se decidió utilizar este término para designar el Centro de Interpretación del Camino de Santiago a su paso por Iruñea. «Aquí se muestra información del camino en el tramo de Nafarroa y también la historia de Iruñea relacionada con el camino», explica Mikel Alcoz, guía del centro. Situado en la calle Mayor número 20, abrió sus puertas en marzo y ya ha sido un punto de encuentro de alrededor de 2.500 personas interasadas o que están realizando la ruta. Además, pretende ser un punto de información pero también de interpretación y de experiencia.

Ultreia está impulsado por el Ayuntamiento de Iruñea y la Fundación Koine, y se ha financiado mediante el proyecto europeo “Jacob@ccess” en el que también participan los Ayuntamientos de Jaca y Atades de Huesca, la Asociación Escapce de Vie pour Adultes Handicapés (EVAH) y la Communauté des Communes Iholdi-Oztibarre en los Pirineos Atlánticos.

El objetivo de Jacob@ccess es crear una red transfronteriza para la accesibilidad de personas con discapacidad a la cultura y al patrimonio de los territorios atravesados por el Camino de Santiago. Además de Ultreia, se ha puesto en marcha el albergue de Martillué y próximamente se unirán dos centros de interpretación más, uno en Jaca y otro en Izura, en Ipar Euskal Herria. El proyecto cuenta con 1,9 millones de presupuesto cofinanciado en un 65% por Fondos FEDER. Iruñea aporta 450.000 euros y recibe una financiación de 292.500 euros.

La visita se realiza con audioguía, tiene una duración de treinta minutos y puede ser individual o en grupo, todas gratuitas pero con reserva previa.

Además, que el centro esté pensado en todo momento en la accesibilidad universal implica que la sala cuente con una serie de elementos o recursos museográficos innovadores que ayudan a las personas que tengan cualquier tipo de discapacidad. Así, el centro se divide en cinco ámbitos que combinan pantallas interactivas y proyecciones.

Luces, imágenes y música se coordinan con la historia del Camino de Santiago y de la vieja Iruñea. Sin embargo, el primer módulo es la propia entrada, área de información donde se explica a los peregrinos «qué servicios hay, qué centros de masaje, dónde pueden encontrar calzado y ropa o incluso dónde pueden conseguir la credencial», detalla Alcoz.

Una vez en el interior del centro, el visitante puede acceder al módulo interactivo “El camino accesible”. Hay tantos caminos, que cada caminante escoge el suyo y lo vive a su manera, pero seguir uno solo puede significar retroceder. De este modo, este interactivo permite consultar las diferentes rutas de peregrinación que pasan por Iruñea haciendo enfásis en sus características de accesibilidad. Si seleccionamos la ruta de Baztan, el camino francés, el camino aragonés o la ruta del Ebro, la pantalla muestra la información dividida por tramos o días, destacando la dificultad, el desnivel y una breve descripción.

El siguiente ámbito, “Pamplona, la primera del Camino”, adentra al visitante en la ciudad como destino importante del Camino de Santiago. Precisamente, Iruñea era la primera ciudad con la que se encontraba el pregrino medieval al cruzar los Pirineos, un lugar para reponer fuerzas y visitar la ciudad. Las dos pantallas –iguales pero en diferente altura para las personas en silla de ruedas–, «nos muestran cómo era Iruñea cuando llegaba el penitente en la Edad Media y cómo es hoy en día», aclara Alcoz. Dividida en cuatro temas, la pantalla enseña un plano de Iruñea del siglo X y otro actual, la gastronomía de aquella época y los manjares típicos de hoy en día, un plano centrado del Camino, las diferentes rutas que perforan la ciudad y, por último, las actividades medievales, que explican, por ejemplo, que en la Edad Media los sanfermines comenzaban el 10 de octubre.

Interpretar y experimentar

El cuarto módulo, “Pamplona, cruce de caminos”, presenta la compleja creación de Iruñea. Ahonda en la historia de la urbe y cómo se desarrolló esta a lo largo de los siglos. Comenzando en la vieja Baskonia, el vídeo relata el establecimiento de Los Burgos y cómo se unieron a través del Privilegio de la Unión, dictado por Carlos III de Navarra en 1423.

En el desarrollo de la ciudad, formada por pobladores de orígenes variopintos, sobre todo de origen franco, influyó también el paso de los caminantes, impulsando el repoblamiento. Asimismo, la narración destaca la conquista de Nafarroa por parte del Reino de Castilla y termina en el siglo XXI. Además, Alcoz detalla que la audioguía es automática, ya que «cuando te acercas a la pantalla se conecta automáticamente y hace una breve introducción», sincronizándose con el vídeo.

Por último, “El camino de las estrellas” constituye el espacio de mayor impacto. Se trata de un juego de espejos audiovisuales, una multiproyección envolvente que lleva al visitante a la historia del Camino contada por el juglar invidente Arnaut Guillén, personaje histórico que trabajó al servicio del Rey de Nafarroa en el siglo XV.

Locuciones autodescriptivas para personas que sufran alguna discapacidad visual, cables que se conectan a la audioguía para activar desde el audífono, rampas, marcas táctiles o detectores de caída son solo algunos elementos que permiten que todas las personas puedan sentir el reforzar de los pasos, ser testigos de la antigüedad o, simplemente, ensanchar el camino para que todos puedan disfrutarlo.