Según informa el Ejecutivo, ya en vía de apremio, la deuda acumulada por las personas contribuyentes con la Hacienda Tributaria de Nafarroa ascendió en 2018 a 514 millones de euros, un 0,28% más que en 2017.

Según los datos, dos terceras partes de esta deuda provienen de sociedades anónimas y limitadas y el 52% se concentra entre las 300 personas físicas y jurídicas con deudas superiores a los 300.000 euros.

Esta información figura en la Memoria de 2018 que el organismo autónomo ha hecho pública en su web. En el documento se analizan las actuaciones y se establecen una serie de indicadores que miden la eficiencia y el desempeño de los recursos.

En concreto, por cada euro invertido en el funcionamiento del organismo autónomo, la Hacienda navarra ha conseguido obtener 7,041 euros mediante la aplicación de las medidas de control tributario. Esto mejora en un 17,2% el ratio de 2017, cuando por cada euro invertido se obtuvieron 6,004 euros. También ha mejorado el importe sobre el conjunto de la recaudación líquida por gestión directa: un 7,26% frente al 5,98% de 2017.

Los datos exponen que en el conjunto de oficinas de atención al contribuyente se registraron más de 250.000 atenciones de forma presencial, a las que hay que sumar más de 200.000 atenciones por vía telefónica y alrededor de 20.000 por correo electrónico. Según las encuestas de satisfacción realizadas tras la atención telefónica, la puntuación dada por los contribuyentes es de 8,06 sobre 10 puntos, frente a los 7,72 obtenidos el pasado año.

La administración electrónica se consolida como punto de atención. En 2018 se produjeron 3,9 millones de accesos a los diferentes servicios telemáticos, lo que supone un aumento del 9,36%.

Los ingresos se recuperan
En cuanto a la recaudación, en 2018, la Hacienda navarra ingresó 5.107 millones de euros, recuperando los niveles anteriores a la crisis económica y devolvió 1.624 millones. El saldo de la recaudación líquida fue de 3.482 millones de euros.

Según se explica en la memoria, se trata de un año atípico por los cambios en el calendario fiscal: como consecuencia del acortamiento del plazo de las devoluciones y el mayor margen para los pagos, en 2018 se ingresaron 11 mensualidades de IVA y se devolvieron 14. Se adelantaron asimismo las devoluciones del Impuesto de Sociedades afectando a la recaudación de este impuesto. Además, se produjo un retraso en una remesa con el Estado que se trasladó al mes de enero quedando fuera del balance contable del año 2018.