Pasadas las 13 horas de ayer saltaba la noticia de que PSOE y Unidas Podemos tenían una sorpresa: un preacuerdo de gobierno de coalición redactado en un santiamén y que ahora va a precisar del apoyo de otros grupos. Tendrán que definirse fuerzas vascas como PNV y EH Bildu. Los jeltzales anunciaron ayer que actuarán con reponsabilidad. Fuentes de la formación de Arnaldo Otegi adelantaron a este diario que tomarán su posición en base a los «hechos» que se pongan sobre la mesa.
La constitución de las Cortes está prevista para el 3 de diciembre y el pleno de investidura se anuncia para la semana que arranca el día 9, aunque esa fecha es festiva en Madrid. Para que Pedro Sánchez pueda ser elegido en una primera votación, necesita 176 apoyos. Lo que se ve muy difícil. En una segunda convocatoria, precisa más votos a favor que votos en contra. Desde la derecha, PP, Navarra Suma, Vox y Ciudadanos suman 152 escaños.
Por su parte, PSOE y Unidas Podemos tienen 155 escaños, a los que se pueden añadir los 3 de Más País y Compromìs y 1 del Partido de Revilla, que ya apoyó a Sánchez en los plenos de junio y setiembre. En total son 159, pero hacen falta más para luego poder gobernar y aprobar presupuestos.
El PNV será «constructivo»
El PNV cuenta con siete diputados y diputadas. Su portavoz, Aitor Esteban, avanzó ayer en Sabin Etxea que su grupo va a ser «responsable y constructivo». Pero apuntó que tienen que «ver cómo evoluciona esto, porque lo que conocemos son solo principios generales y habrá que ver en qué se van concretando las conversaciones que tienen entre ellos y, evidentemente, las que tengan con nosotros y con otros partidos».
En cuánto a de qué dependería el voto del PNV, Esteban afirmó que «es fundamental hablar de programa, de medidas, de qué líneas van a priorizar y, desde luego para el PNV, este Gobierno debe afrontar y dar una solución a los problemas de encaje territorial en el Estado de la nación vasca y de la nación catalana». «Ya veremos qué posición adoptamos», concluyó el portavoz de los jeltzales.
Aitor Esteban dejó claro que el PNV se alegra del preacuerdo alcanzado, que venían pidiendo desde hace tiempo. Pero al mismo tiempo no disimuló que «lamenta que este acuerdo no llegara hace unos meses, cuando era tan necesario como en la actualidad, y que para cerrarlo tanto PSOE como Podemos hayan necesitado de una repetición electoral que ha tenido como principales consecuencias el aumento de la desafección de la ciudadanía hacia la política y la fuerte irrupción de la ultraderecha que encarna Vox en el Congreso de los Diputados».
«Agenda democratizadora»
EH Bildu hará pública hoy su posición oficial, pero fuentes de esta formación adelantaron a GARA que la fijarán en base a «hechos» y a comprobar si se avanza hacia una «agenda democratizadora». «La pregunta no es qué vamos a hacer nosotros, sino qué van a hacer PSOE y Unidas Podemos», subrayaron con una frase con la que ya afrontaron las anteriores sesiones de investidura.
La formación independentista critica «la frivolidad» de quienes hace unos meses decían que «no iban a poder dormir» y ahora alcanzan un acuerdo.
Desde EH Bildu insisten en que «seguimos estando ante dos únicas posibilidades». Una es ir hacia la involución, «como la anunciada por Pedro Sánchez en campaña, hablando de introducir la convocatoria de consultas en el Código Penal y con el golpe de estado digital». La otra, adoptar la «agenda democratizadora de Llotja de Mar».
Según estas fuentes independentistas, «hablarán los hechos» al ver qué posiciones se adoptan sobre el derecho a decidir, los presos políticos, la reforma laboral, las pensiones». Y recuerdan la posición favorable que Unidas Podemos hacia estos puntos.
Visión catalana
Otro de los elementos determinantes en la investidura será la posición del independentismo catalán. ERC anunció ayer que parten del «no» y que si el candidato de PSOE quiere que reconsideren su posicionamiento, tiene que volver a apostar por el diálogo y reconocer que el problema en Catalunya no es interno y de convivencia, sino político y del Estado español. «Si quieren algo de nosotros se tienen que sentar y hablar, y, si no, no hay nada que hacer», subrayó la portavoz y secretaria general adjunta, Marta Vilalta.
La portavoz de JxCat en el Congreso, Laura Borràs, afirmó que con el preacuerdo Pedro Sánchez, «ha conseguido incorporar a Unidas Podemos al marco mental del 155». «Mientras haya presos, exiliados, represaliados y mientras no se pueda hablar del derecho a la autodeterminación, no podemos apoyar la investidura», añadió.
Portavoces de las CUP también se posicionaron en contra del preacuerdo.