La Mesa del Parlament ha asumido que el presidente del Govern, Quim Torra, ya no es diputado de la Cámara, tras haber descartado votar una propuesta de JxCat para rechazar las instrucciones que había dado el secretario general, Xavier Muro, para iniciar los mecanismos para retirarle el acta.

JxCat ha acusado a la Mesa y su presidente y del Parlament, Roger Torrent, de haber validado la decisión del secretario general al haber rechazado que la Mesa votara la propuesta de su partido.

JxCat había planteado dejar sin efecto las instrucciones dictadas por el secretario general de hacer efectiva la pérdida de la condición de diputado del president y confirmar su escaño. La propuesta requería a la Junta Electoral Central (JEC) anular el acuerdo del pasado jueves, en base a lo que prevé el artículo 39.5 de la Ley de procedimiento administrativo común de las administraciones públicas, y el artículo 44 de la Ley reguladora de la jurisdicción contenciosa-administrativa, previo a la interposición de un recurso.

Según JxCat, el acuerdo de la JEC «excede» las competencias que la Administración electoral tiene atribuidas legalmente, y recuerdan que el pleno del Parlament aprobó una resolución que ratificaba a Torra como diputado y presidente de la Generalitat.

«Esta resolución, que de acuerdo con la jurisprudencia del Tribunal Constitucional tiene valor jurídico, no ha sido objeto de ninguna impugnación», destacaban desde JxCat, y constatan que la Mesa del Parlament interpuso un recurso contencioso contra el acuerdo de la JEC.

Para JxCat, la declaración de cese de cualquier diputado es una cuestión «estrictamente parlamentaria», y por ello consideran que las instrucciones de Muro contravienen el ordenamiento jurídico y la resolución que ratificó a Torra como diputado y president.

Paralelamente, la Junta Electoral Provincial de Barcelona ha acordado expedir la credencial de diputada a Maria Senserrich en sustitución de Quim Torra.

Postura de ERC

El presidente de ERC en el Parlament, Sergi Sabrià, ha concretado que la propuesta de los republicanos para afrontar la inhabilitación de Torra como diputado es blindar la presidencia de la Generalitat, «dejar en suspenso» su condición de diputado y «luchar para revertirlo», y con ello garantizar el voto del Parlament.

«No podemos poner en riesgo la soberanía del Parlament. No podemos tomar decisiones que nos pueden hacer sentir bien unos minutos, pero que no resuelven el problema. Si se apuesta por la desobediencia estéril, se mantendrá uno o dos plenos, pero le haremos el juego al Estado», ha dicho en una rueda de prensa.

El dirigente republicano ha recordado que hay un acuerdo para sacar adelante los Presupuestos –una situación que no sucedía desde 2017– y que hay que tomar medidas para atender a los afectados por el temporal Gloria, y ha advertido de que desobedecer a la inhabilitación, dictada por la Junta Electoral Central (JEC) y ratificada por el Tribunal Supremo, llevaría a una parálisis que sería «una traición» a los ciudadanos.