Nuevos casos en los tres herrialdes elevan el recuento del Gobierno de Lakua a 17 personas infectadas por coronavirus en la CAV. En Gipuzkoa y Bizkaia no hay más que dos afectados, pero en Araba la situación es mucho más compleja con trece positivos, la mayor parte en torno a lo que se ha definido en la comparecencia de la consejera Nekane Murga y el director de Vacunas y Vigilancia de Lakua, Txema Arteagoitia, como «el cluster de Txagorritxu».
En el conjunto de Euskal Herria se cuentan ya por tanto 20 afectados, dado que en Nafarroa se informa de dos casos y cerca de Baiona de otro.
En Araba estaría también la práctica totalidad de las personas en cuarentena; si el martes su número se fijó en torno a un centenar, este miércoles son ya 250. Se trata de personas que han tenido contacto directo con quienes ya han contraído el virus.
En una comparecencia caótica en la aportación de datos –lo que Murga ha justificado en que las cifras cambian continuamente para acabar afirmando que «tampoco quiero meterme en tanto detalle»–, no ha quedado claro cuántos de estos casos se han extendido desde Txagorritxu. A preguntas de los periodistas se ha añadido que hay dos profesionales infectados en ese centro pero que residen fuera: en La Rioja y Burgos concretamente.
De estos 17 infectados hay seis que están hospitalizados, cuatro de ellos en Araba, uno en Bizkaia y otro en Gipuzkoa. Únicamente una de ellas estaría en situación «grave».
Arteagoitia ha añadido que se han realizado 176 pruebas diagnósticas, aunque en torno a los resultados «hay ocho pendientes». «Se llega a donde se puede», ha añadido. Y luego ha apelado a los medios a no solicitarles tantos datos: «No sean tan tiquismiquis. Esto supone un reto y lo estamos afrontando de la manera más diligente que podemos. No somos infalibles, pero intentar, lo intentamos».
«Creo que hemos dado más datos de lo que debíamos», ha apostillado Murga, también en tono de queja.
«Urgencia no es la palabra»
La consejera Murga ha elevado la voz igualmente cuando se le ha planteado si la asistencia está garantizada, dado que se ha conocido la convocatoria pública urgente para contratar médicos. «Urgencia no es la palabra. Somos capaces de dar una asistencia de calidad. Aunque es cierto que igual tenemos que reducir actividades no urgentes», ha asegurado.
Preguntada por lo ocurrido en el centro de salud de Olarizu, cuya actividad se ha restringido y parte de la plantilla estaría en cuarentena, Nekane Murga también ha eludido responder: «Son medidas organizativas internas, no creo que tengamos que entrar en tanto detalle».