«El miércoles 4 de marzo emitimos un comunicado que indicaba que nuestros planes para organizar el Masters de Augusta, National Women’s Amateur and the Drive, Chip and Putt National Finals no habían cambiado. Desafortunadamente, los riesgos son cada vez mayores asociados con el extendido coronavirus (COVID-19) y nos han llevado a una decisión que sin duda será decepcionante para muchos, aunque estoy seguro de que es apropiado en estas circunstancias únicas», ha señalado en un comunicado su presidente, Fred Ridley.
De esta manera, el primero de los cuatro grandes torneos de golf de la temporada queda pospuesto hasta una fecha en la que se pueda «acoger con seguridad» el mismo que todavía no es conocida ya que no se conoce la fecha en la que se retomará la normalidad en cada país.
«Reconocemos que esta decisión afectará a muchas personas, incluidos nuestros leales patrocinadores. Agradecemos su paciencia mientras hacemos todo lo posible por comunicarnos de manera eficaz y eficiente, y compartiremos cualquier información adicional tan pronto como esté disponible», ha añadido Fred Ridley.
Además, la dirección del PGA Tour de golf ha anunciado la cancelación del The Players Championship, que se estaba disputando en Ponte Vedra Beach (Florida) con el vizcaino Jon Rahm, y al menos otros tres torneos más que le siguen en el calendario de este año.
La decisión se dio a conocer después de que diez horas antes, el comisionado del PGA Tour, Jay Monahan, hubiese dicho que el torneo, considerado el quinto más importante del circuito, continuaba, pero sin que hubiese espectadores en el recorrido de los golfistas.
Sin embargo, los profesionales no estuvieron de acuerdo con la decisión tomada y más después de lo que habían hecho todos los deportes profesionales y universitarios en Estados Unidos, de suspender, al menos durante un mes, las competiciones por causa de la pandemia del coronavirus.