Lakuntza (ELA): «Hace falta más fuerza y hegemonía para lo que nos viene tras la crisis covid-19»
El documento político de ELA titulado ‘Por una salida justa’, que marca 24 objetivos para salir de la crisis del covid-19, ha sido desgranado en una entrevista vía telemática a cargo de los periodistas Irantzu Varela y Jonathan Martínez al secretario general de ELA, Mitxel Lakuntza, y a los miembros del Comité Ejecutivo Maialen Aranburu y Mikel Noval. Ha habido también un par de preguntas de quienes estaban siguiendo la entrevista.
Mitxel Lakuntza ha reconocido, tras la crisis de 2008, que para hacer frente a la nueva crisis sanitaria, económica y social derivada del covid-19 «hace falta más fuerza y hegemonía para lo que nos viene». Ha recordado que en la anterior salió reforzado el poder neoliberal, «de hecho, las rentas salariales perdieron cinco puntos del total de riqueza, que fueron a parar a las rentas de capital».
Lakuntza ha explicado que en este momento lo que se está planteando desde la UE «no es una hoja de ruta diferente a la de 2008», aunque ha afirmado que «tenemos cosas a favor. La crisis sanitaria ha sacado a lo mejor de la sociedad y la construcción social como los servicios públicos». Esa idea «de poner la vida en el centro» es lo que «llevamos a la huelga general del pasado 30 de enero. Es lo que hemos ganado y debemos aprovechar ese reconocimiento social», ha dicho.
Mikel Noval ha insistido en esa idea por «una salida social justa», en la que están incluidas la «perspectiva feminista y ecologista. Somos ecodependientes». Mientras que Maialen Aranburu ha añadido la necesidad de poner los cuidados en el centro de esas vidas, que «tendrá que venir de todas las personas y del planeta. Tenemos que cambiar las prioridades. Tenemos la oportunidad de que la crisis ha puesto esta urgencia encima de la mesa. Y los sectores y trabajos para el cuidado de la vida, desde la limpieza a la sanidad, han pasado a primer plano».
Ha lamentado, sin embargo, que «los trabajos que más aportan al sostenimiento de la vida están precarizados, privatizados y peor valorados. De ahí que en nuestra propuesta insistamos en fomentar el sistema público para garantizar la sostenibilidad de la vida. Tras la crisis de 2008 se produjeron recortes. Reclamamos, en este momento, un sistema único, universal y gratuito de cuidados».
«Miedo a trabajar»
En estos poco más de dos meses de covid-19, Mitxel Lakuntza también ha respondido ante las críticas recibidas desde algunos partidos políticos que apoyan al Gobierno de Lakua por intentar «paralizar» el país, por reclamar no acudir a los centros de trabajo con la pandemia en plena ebullición. «Estamos preocupados por la salud de las y de los trabajadores. No había coherencia en promulgar el confinamiento social y que se mande a trabajar a sectores no esenciales», ha defendido.
Ha denunciado al Gobierno Urkullu porque «ha sido el que con más vehemencia ha trabajado en esa línea de mandar a trabajar a los trabajadores sin tener en cuenta el riesgo. Tuvieron que darse cuenta del error, porque solo entre el 18% y el 25% de las empresas retomaron la actividad las primeras semanas». En su opinión, «el Gobierno de Urkullu se ha distinguido por defender los intereses empresariales».
Lakuntza ha criticado, además, que «no hable, se oculta todo a los sindicatos. Toma decisiones unilaterales. Ocurre con la Enseñanza, en la que se hace más actual la defensa de la huelga». La realidad, a juicio del secretario general de ELA, es que «muchos trabajadores y trabajadoras han ido con miedo a trabajar porque no había medidas de seguridad. Sin embargo, ninguna empresa ha sido paralizada por no cumplir esos requisitos de defensa de la salud».
Maialen Aranburu ha afirmado, en este sentido, que «se debe producir un cambio radical en las politicas que se hacen desde la necropolítica. Necesitamos sumar fuerzas y compartir muchos espacios», a lo que Mikel Noval ha añadido que «va a ser necesario aumentar la correlación de fuerzas para activar la presión social para conseguir el cambio político».
«Sin cambios»
Noval ha explicado que en la política europea «no vemos que haya cambios respecto a lo que ocurrió en su día. El BCE actúa igual. Salva a la banca. Da dinero a tipos de interés negativo para que la banca gane dinero».
Respecto al Estado español, ha asegurado que «algunas pequeñas medidas tienen un contexto social, pero son pocas y parciales». Se ha preguntado «qué ocurrirá una vez que se termine el estado de alerta».
En cuanto al Gobierno de Gasteiz, Noval ha explicado que «cuando inició su andadura le planteamos una serie de propuestas, pero no ha hecho nada. Es una política continuista neoliberal, bajo protección social». Ha indicado que «nuestra propuesta de establecer un recargo del 20% y eliminar deducciones en el Impuesto de Sociedades y establecer una cuota del 1% al 10% en el Impuesto de Patrimonio permitiría contar con 3.750 millones a la CAV y 900 millones en Navarra para poder actuar en materia social. No es difícil si hay voluntad política».
Sin embargo, no se ha mostrado optimista de conseguir esa mejora, porque «el Gobierno Vasco ha hecho política favorable a los intereses del capital, dejando al margen a la ciudadanía».
«Debate fiscal»
Lakuntza ha intervenido para explicar que la clave será «el debate fiscal». Ha dicho que hay margen. «Si equiparamos la presión fiscal con Europa, que reduciría la brecha fiscal 8 o 9 puntos y se aplica el recargo del Impuesto Sociedades a las empresas con beneficios, claro, se podría intervenir en una salida social a la crisis. Porque solo va haber dos formas de acometer esta situación difícil: vía recorte o abordar el debate fiscal para ver quién paga lo que se necesita» para oxigenar a esta sociedad de nuevo en crisis, después de haber sufrido otra hace poco más de diez años.
En este caso, el secretario general de ELA, interpelado sobre la necesidad de llegar con esos mensajes al pueblo, ha explicado que «cuando nos viene la gente al sindicato pasando mal y se les habla claro y se les dice que el sindicato está para pelear, se animan y pelean». Entiende, sin embargo, que «la nitidez del mensaje no llega igual desde todos los planos. «Es la crítica que hacemos a la izquierda de este país». Por su parte, Noval ha insistido en este tema para concluir que «se debe hacer mucha pedagogía».
Por último, los miembros de ELA han dejado claro que «el incremento en la afiliación sindical en estos momentos llega de los sectores precarizados y feminizados». Lakuntza ha asegurado que «el sindicato ha puesto su foco ahí con buenos resultados en la lucha, como en residencias».
También han añadido que ELA «apuesta por el diálogo social», pero han explicado que «lo que hace el Gobierno Vasco es un paripé. No respeta las reglas democráticas según el peso de las organizaciones. El Gobierno Vasco anterior definió el papel de las organizaciones sindicales en dar cobertura a los gobiernos, si no se hace así, te quitan las subvención», ha denunciado Noval. En cuanto a Nafarroa, Lakuntza ha puesto el ejemplo de las ayudas que recibían de forma directalos sindicatos que participaban en la mesa de diálogo social, «aspecto que ni LAB ni ELA compartimos».