La consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, eludió el jueves criticar el acuerdo PSOE-UP-EH Bildu para la derogación de la reforma laboral, pero el portavoz del Ejecutivo de Lakua, Josu Erkoreka, ha pasado hoy a tratar de ensuciarlo, recurriendo para ello a mezclarlo con un elemento totalmente ajeno a EH Bildu: el sabotaje a la vivienda de la líder del PSE, Idoia Mendia, en el marco de las protestas por el preso Patxi Ruiz.
Ha dicho Erkoreka que le parece «chocante» el acuerdo de Madrid cuando hay «un acoso intolerable» a la secretaria general del PSE. En su cuenta de Twitter, en euskara, ha ido más lejos aún con una expresión que viene a acusar directamente a EH Bildu de ese ataque.
#Elkarrizketa Harrigarria da Madrilen ezker abertzaleak akordio hori gauzatzea hemen alderdi sozialistako ordezkarien kontra eraso izugarriekin dabilenean. Harritzekoa da eta ez da ulertzeko erraza @Bizkaiairratia pic.twitter.com/gcEJsRFOCL
— Josu Erkoreka (@jerkoreka) May 22, 2020
Pese a la posición clara de EH Bildu sobre ese hecho, Erkoreka ha dicho en la entrevista ver «un fondo de justificación y de resistencia a condenar y a rechazar ese tipo de conductas». A su juicio, estos ataques «abren una espita» y ha preguntado si todo «acaba en la pintura o puede ir más allá».
En una entrevista concedida a Radio Popular-Herri Irratia, recogida por Europa Press, el portavoz del Ejecutivo Urkullu ha dicho que ese ataque «es un dato a tener en cuenta y que sorprende al observador imparcial».
Para Josu Erkoreka, «que los representantes políticos tomen posición clara en relación con los gestos de acoso, de presión y de violencia, me parece que tenía que ser el 'abc' de la convivencia en Euskadi».
«La luz de reserva encendida»
Posteriormente ha tomado el relevo el presidente del Euzkadi Buru Batzar, Andoni Ortuzar, quien ha advertido al Gobierno de Madrid de que «difícilmente» podrá seguir toda la legislatura si continúa con un «totum revolutum» de pactos, , porque «la geometría variable sin coherencia es un circo político».
Ortuzar ha subrayado que la confianza del PNV hacia Sánchez «se ha ido gastando» durante la pandemia y ahora «tiene la luz de reserva encendida», y ha recordado que ya aconsejó al presidente español «no cambiar de caballo en mitad del río» cuando se apoyó en Ciudadanos en vez de en ERC para aprobar la anterior prórroga del estado de alarma.
Ahora, , al pactar con EH Bildu la derogación de la reforma laboral, «ha hecho un pan con unas tortas, tiene enfadado a Ciudadanos, a ERC no le ha hecho mucha gracia y ha enajenado la buena disposición del PNV. No le arriendo la ganancia al PSOE, que ya tiene bastantes problemas en España como para generarse más».