La temporada 2020 de la F1 ha dado el pistoletazo de salida con la carrera del GP de Austria, y lo ha hecho de manera reivindicativa. Lewis Hamilton (Mercedes), que ha lucido una camiseta con el lema "Black Lives Matter" que ganó protagonismo mundial a raíz del brutal asesinato del afroamericano George Floyd a manos de un policía blanco en Minneapolis (Minesota, EEUU), ha encabezado la acción, secundado por aproximadamente la mitad de la parrilla.
Los pilotos han emulado de esta forma a Colin Kaepernick, ex quarterback de los San Francisco 49ers, equipo de la liga profesional de fútbol americano (NFL), que perdió su puesto de trabajo por arrodillarse durante el himno de los Estados Unidos en protesta contra el racismo.
Los pilotos han guardado un minuto de silencio antes de que se interpretara el 'Land der Berge', el himno de Austria, que albergará las dos primeras de las ocho carreras del Mundial de F1 inicialmente anunciadas en Europa: el Gran Premio de Austria y el de Estiria -región en la que se encuentra el Red Bull Ring de Spielberg-, el próximo fin de semana.