El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha anunciado que este miércoles va a proponer una acción coordinada de salud pública al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) para que se limite la movilidad en todos los municipios de más de 100.000 habitantes donde se cumplan estos criterios: que haya más de 500 casos de covid-19 en los últimos 14 días, que la positividad de las pruebas PCR sea superior al 10% y que el índice de ocupación de las UCI sea superior al 35%.
Estos criterios se cumplen en la actualidad en la ciudad de Madrid y decenas de zonas sanitarias de la Comunidad, pero no en Iruñea, donde –como remarcó el martes la presidenta navarra, María Chivite– la positividad no está tan disparada, tampoco se superan en la actualidad los 500 y la capacidad hospitalaria es puntera.
Entre los municipios vascos con más de 100.000 habitantes, a fecha del 1 de enero de 2019, se encuentran Barakaldo, Bilbo, Donostia, Gasteiz e Iruñea, aunque en este momento en ninguno de ellos se cumplen los criterios que llevarían al confinamiento.
En cualquier caso, en los prolegómenos del Consejo Interterritorial tampoco se da por seguro que se vaya a imponer el confinamiento de Madrid, sino que se abre la posibilidad de esperar a la efectividad de las restricciones que ya están en marcha.
Volviendo a lo anunciado por el ministro español, en esas zonas además de la movilidad se limitarán los contactos sociales y se tomarán medidas de reducción horarios y aforos y de refuerzo de sus capacidades asistenciales.
Illa ha anunciado esta medida tras una reunión mantenida con el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, en el segundo encuentro mantenido esta semana, después de las discrepancias que han tenido ambas administraciones por los criterios a aplicar para frenar la transmisión del coronavirus en la región.
Madrid había exigido que otras comunidades aplicaran las mismas restricciones que se veía obligada a adoptar por la expansión del virus en esta comunidad.
«He visto una ambiente propicio en las conversaciones que he mantenido con el resto de consejeros de Sanidad para que en el resto de las comunidades autónomas, si se den las condiciones propicias, se adopte lo mismo que hemos acordado con la Comunidad de Madrid», ha aseverado el ministro de Sanidad.
Illa ha admitido que esta medida extendida a todo el Estado español, que espera que entren en vigor lo antes posible, hace posible que las recomendaciones hechas por el Gobierno sean efectivas en Madrid.
El acuerdo alcanzado con Madrid va a ser analizado por la mañana en la ponencia técnica y en la Comisión de Salud Pública y, posteriormente y por la tarde, se discutirá en el pleno del CISNS, en el que participan los consejeros de Sanidad de todas las comunidades autónomas.
Asimismo, el ministro de Sanidad ha recordado que la situación de la pandemia en la Comunidad de Madrid es «muy preocupante» y exige actuar con «mucha determinación», ya que se sitúa en los 780 casos de covid-19 por los 100.000 habitantes, con una tasa de hospitalización y de ocupación en UCI alrededor del 40%, así como de positividad en las pruebas PCR superior al 20%.
También ha reseñado que el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) fijó los umbrales de actuación en los 60 casos por 100.000 habitantes y señaló como situaciones «muy preocupantes» cuando se produjeran incidencias acumuladas de 200 casos por 100.000 habitantes.
Urkullu y EH Bildu, disconformes
Tras anunciar Illa el martes noche este plan que ha presentado como consensuado con Madrid, el lehendakari de la CAV, Iñigo Urkullu, se ha mostrado disconforme: «No lo conocíamos con detalle y no es nada grato el juego que estamos viendo. Durante el fin de semana hablamos con el ministro de Sanidad y otros representantes sobre las medidas a adoptar, y ayer nos enteramos por los medios de las intenciones del Gobierno español. Nosotros les solicitamos por escrito el fin de semana cuáles iban a ser esas propuestas y no hemos recibido nada. Ayer nos enteramos por los medios de sus intenciones», ha lamentado en entrevista a Euskadi Irratia.
En este sentido, ha señalado que la decisión se ha tomado «para que ceda la comunidad autónoma en esa disputa que mantienen», un comportamiento que «para nosotros no es nada grata».
Desde Nafarroa, también EH Bildu ha alzado su voz contra este planteamiento estatal, instando a la presidenta Chivite a no dejarse condicionar. Muestra su «más firme rechazo» al acuerdo alcanzado entre el Gobierno español y la presidenta de Madrid, Díaz Ayuso. «Navarra no puede aceptar tutelajes que no hacen sino anular las competencias propias e imponer unas directrices únicas cuyo fin es uniformizar territorios», dice en una nota.
EH Bildu considera que dicho acuerdo «surge de la necesidad de ocultar la mala gestión de Díaz Ayuso en Madrid y al que Sánchez ha accedido por mera conveniencia política. Se trata de un mando único encubierto con el que el Gobierno de Sánchez pretende aplicar criterios homogéneos sin tener en cuenta la realidad y la capacidad de decisión de cada territorio».
En esa línea, EH Bildu emplaza al Ejecutivo foral a «no aceptar bajo ninguna circunstancia ningún chantaje político». Según defiende, «Navarra tiene la competencia y capacidad más que suficiente para habilitar los recursos y establecer las medidas necesarias para hacer frente a la situación de pandemia en Navarra».
«Desde EH Bildu consideramos inaceptable que sea Ayuso quien determine lo que habría que hacer en Navarra en un momento dado», añade, para apostillar finalmente que «exigimos que Chivite, como presidenta del Gobierno de Navarra, tampoco ceda al chantaje y trabaje desde aquí en una planificación estratégica y dotación de recursos eficiente que reconduzca la situación cuanto antes».
Nafarroa, a la espera
¿Y qué ha dicho el Gobierno navarro? Tras la reunión semanal de este miércoles, básicamente se ha situado a la expectativas de las citas de hoy en Madrid.
Así, el portavoz del Ejecutivo, Javier Remírez, ha apuntado que «no vamos a hablar de cuestiones que se no se han concretado en lo que afecta a Navarra». «Lo que ayer se trató entre el Ministerio y la Comunidad de Madrid afecta a la Comunidad de Madrid. Hoy se concretarán, si llega el caso, los criterios que afectan al conjunto del Estado, y vamos con ánimo propositivo y de poner encima de la mesa otras cuestiones y desde luego de cara a colaborar con el Ministerio de Sanidad para solucionar esta cuestión».
Así, ha señalado que el contenido del acuerdo «ni nos preocupa ni nos deja de preocupar». «Nos hemos anticipado en muchas de las medidas que se han ido tomando a otras comunidades, con medidas como reducción de aforos y limitación de reuniones a 6 personas. Tenemos un horizonte muy claro, que es el testeo, el rastreo y el seguimiento», ha dicho.
Remírez ha considerado que este trabajo «va a ser positivo en el medio y largo plazo» y ha valorado la situación de Nafarroa en cuanto a presión hospitalaria destacando que el número de camas ocupadas por covid-19 está en el 9,89% y las de UCI en el 22%.