Tras descansar ayer, el Eibar ha vuelto al trabajo para ultimar los detalles del derbi que le enfrentará a Osasuna el domingo. Lo ha hecho sin Recio y Expósito, ambos lesionados, cuya ausencia se une a la del sancionado Diop y complica la composición del centro del campo azulgrana. Recio, que se retiró lesionado del encuentro frente al Elche, arrastra las consecuencias de un traumatismo dorsolumbar, mientras Expósito sufre molestias en la rodilla derecha. Sergio Álvarez es, así, el único mediocentro específico que tiene José Luis Mendilibar a su disposición.

Habrá que ver cómo hace frente a las ausencias el técnico, que sí podrá contar con sus dos últimos refuerzos, Álex Pozo, que lleva dos semanas entrenando con el equipo –y por eso mismo con más posibilidades de ser titular– y Bryan Gil que, al haber estado concentrado con la selección española sub21, apenas ha compartido un entrenamiento con sus nuevos compañeros.

Respecto a sus nuevos jugadores, el zaldibartarra cree que «son diferentes a lo que tenemos. Pozo puede jugar de lateral y de extremo, es rápido, es guindilla, si juega por delante puede buscarnos las espaldas de la defensa rival, que hasta ahora hemos tenido problemas con eso. Y Bryan también. Puede hacer uno contra unos, puede encarar, irse del rival…, que hasta ahora tampoco teníamos gente tan clara para eso como él. Poder desbordar y poder ponerte en superioridad cuando los partidos están cerrados y se complican. Creo que nos van a ayudar», ha asegurado Mendilibar, que no se ve tan contento con la composición final de su plantilla.

Por el alto número de jugadores y porque la falta de fichas ha impedido acometer más incorporaciones que ve necesarias. «Estamos mucha gente. Siempre he dicho que me gustan plantillas de 22 o 23 jugadores como máximo. Ahora tenemos el armario lleno, 25. Espero que el día a día sea bueno por parte de todos. Porque si hay tanta gente, va a haber jugadores que van a participar menos que otros; juegan once y hasta 25 son muchos los que se quedan fuera. Espero que el día a día sea bueno. Y por otra parte esa imposibilidad de poder sacar jugadores nos ha evitado que pudiera llegar algún otro jugador que creo que en estos momentos sí nos puede hacer un poco de falta. Sobre todo ahora, para mañana por ejemplo, para este fin de semana».

Un fin de semana que trae a Ipurua a un rival al que el Eibar no ha derrotado todavía en Primera. Tampoco lo tendrá fácil para hacerlo el domingo porque Osasuna «ya estuvo muy bien la temporada pasada, terminó bien, ha empezado bien ésta, tiene claro a lo que juega, lo hace bien encima… Es bastante de nuestro estilo, lo que pasa es que, por lo que sea, cuando hemos jugado contra ellos a nosotros nos ha costado más jugar a lo que queremos que a ellos y ahí está la diferencia».

Por eso Mendilibar pide «ser nosotros, sabiendo lo que tenemos enfrente, el juego del que está enfrente, pero siendo descarados». Aunque la clave del choque la sitúa, «sobre todo en estar concentrados los noventa minutos. Normalmente los derbis se ganan o se pierden por errores puntuales, jugadas puntuales. Tenemos que estar los noventa minutos superconcentrados».

Los azulgranas realizarán mañana un último entrenamiento previo al encuentro. Habrá que esperar a entonces para saber si hay más bajas además de las cuatro confirmadas (Cote, Recio, Expósito y el sancionado Diop). Por ejemplo la de Enrich, que aunque sí jugó el amistoso frente al Real Unión, se ha perdido los tres últimos encuentros oficiales por problemas físicos y se perdió el entrenamiento del miércoles por motivos bien conocidos. Pero parece que el club ha optado por el silencio en todo lo referente a su capitán.

Y de la misma manera que no ha habido reacción pública de ningún tipo tras la confesión que realizó el pasado miércoles en el juicio en el que participa como imputado, tampoco hoy se le ha trasladado a José Luis Mendilibar la pregunta de un periodista sobre si Enrich se encuentra en condiciones de jugar.