En la tertulia de parlamentarios de Radio Euskadi, el parlamentario de EH Bildu Iker Casanova ha destacado que lo importante, en la actual situación, es tomar «medidas eficaces» y ha lamentado que se transmita a la opinión pública «un mensaje muy negativo» con «todo este espectáculo de confrontaciones competenciales y problemas jurídicos y técnicos» a la hora de tomar medidas.
Tras lamentar que se haya «perdido una semana» en implementar las medidas anunciadas el pasado fin de semana por el Gobierno de Iñigo Urkullu, ha afirmado que, aunque lo fundamental es centrarse en las medidas contra el virus y su aplicación, cree que hay que hacer una reflexión sobre que no haya capacidad en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa para tomar decisiones, que «en otro sitio sí se han podido tomar».
A su juicio, ello demuestra que el marco potencial condena a la CAV «a una minoría de edad, a estar permanente tutelados» y a no poder decidir «ni siquiera sobre las medidas que afectan a la salud».
Tras defender que las medidas no se deben limitar al ámbito de la hostelería, ha asegurado que, cuando se llega a un problema con un crecimiento exponencial, «el umbral de tolerancia debe ser bajo» y adoptar medidas cuanto antes y ha advertido de que «quien sacrifica la salud para mejora la economía, a largo plazo ni va a tener salud ni economía».
PNV: «Un nuevo estatus»
Por su parte, la parlamentaria del PNV María Eugenia Arrizabalaga cree que el auto del TSJPV ha puesto en evidencia «la necesidad» de un nuevo estatus porque las competencias vascas están «mediatizadas no solamente políticamente sino también judicialmente».
Según ha indicado, con este auto, el Ejecutivo de Gasteiz se encuentra ante una situación de «absoluta inseguridad jurídica» ante la «imposibilidad jurídica» de adoptar las medidas que se consideran necesarias para intentar «controlar la evolución del virus».
La parlamentaria jeltzale ha afirmado que eso es lo que ha llevado a Urkullu a tener que adoptar las medidas que se consideraban necesarias para intentar controlar la evolución del virus y lo que «ha llevado a Urkullu a tener que solicitar que Pedro Sánchez declare el estado de alarma».