Las amenazas de muerte por parte del acusado hacia su exnovia y el nuevo compañero de esta se perfilan como una de las claves del juicio del crimen de El Infierno durante el que, este martes, el jurado ha escuchado una grabación intimidatoria recibida por la mujer en su móvil, así como varios whatsapp de similar contenido que el inculpado remitió a un amigo.

Los hechos, que están siendo enjuiciados en la Sección Primera de la Audiencia de Gipuzkoa desde el pasado jueves, sucedieron la madrugada del 1 de marzo de 2019, cuando presuntamente el acusado quemó un edificio abandonado en la zona de El Infierno de Donostia.

Los mensajes dados a conocer en la sesión de hoy al jurado resultan relevantes porque, una vez que el inculpado admitió ser el autor de los hechos en la segunda jornada del juicio, podrían permitir a las acusaciones acreditar que el crimen fue producto del «fuerte resentimiento y animadversión» que el procesado sentía por el nuevo compañero sentimental de su exnovia.

De esta manera, los miembros del jurado han podido escuchar un mensaje de voz enviado por el procesado a su expareja en el que les insta a ella y a su nuevo novio a abandonar El Infierno antes de 48 horas porque de lo contrario se iban a reunir con una persona fallecida meses atrás y que los tres conocían.

Asimismo, la secretaria judicial ha dado lectura a varios mensajes de whatsapp que el encausado intercambió con un amigo residente en El Infierno y que conocía a todos los implicados, en los que le confesaba que si él terminaba en la cárcel por el asunto de violencia machista que tenía pendiente de juicio «alguien» caería. «Suerte en lo que les queda por vivir», apostillaba el inculpado en otro mensaje.

Este hombre residente en El Infierno ha protagonizado la anécdota del juicio de hoy, ya que al no comparecer por tercera vez en la sala de vistas ha obligado al presidente del tribunal a emitir una orden de detención para que fuera localizado y conducido a la Audiencia por la Ertzaintza.

De esta manera, el testigo ha declarado por fin en el juicio, tras excusarse por sus anteriores incomparecencias alegando que en la primera ocasión se equivocó de juzgado y que en la segunda confundió la hora de la citación con la fecha, lo que le ha valido el reproche del magistrado presidente.

Posteriormente, este hombre ha dicho que el acusado pensaba que su exnovia había iniciado una nueva relación sentimental con otro chico y quería «vengarse» de ella, y ha explicado también que este chico le dijo en una ocasión que el imputado les había amenazado con quemarles la casa.

En esta misma sesión han declarado tres agentes de la Ertzaintza que han recordado el método que empleó la Policía autonómica para detener al acusado, a través del seguimiento de los movimientos de su tarjeta de transporte, las grabaciones de las cámaras de seguridad de distintos organismos, y la señal de los repetidores de telefonía móvil.

Está previsto que el juicio se reanude este miércoles con nuevos testimonios y las declaraciones de distintos testigos-peritos.