«En ocasiones veo baskonistas», diría Haley Joel Osment, si retomara su personaje de «El sexto sentido» y revisara la plantilla del actual CSKA de Moscú, rival de TD Systems Baskonia este jueves a las 18.00 en el Megasport Arena. Tornike Shengelia, Darrun Hilliard, Johannes Voigtmann o Mike James –y Janis Strelnieks no de milagro, porque al base letón, a quien Alfredo Salazar le echó el ojo previamente, le faltó el canto de un duro para que el jugador báltico recalara en Gasteiz– pisaron la plantilla gasteiztarra, antes de revalorizar su carrera y terminar, cada cual por su camino, en el club del Ejército Rojo a las órdenes de Dmitriis Itoudis.
«Sabemos de la calidad que tienen como equipo y de cómo algunas de las que fueron nuestras estrellas juegan en el CSKA de Moscú», ha comentado Luca Vildoza, minutos antes de emprender viaje a tierras moscovitas. «Por un lado, estamos contentos por volvernos a reencontrar, pero también sabemos que vamos en busca de una victoria, porque la necesitamos», ha recalcado el base argentino.
Lo cierto es que la pista moscovita no se le ha dado históricamente bien al cuadro gasteiztarra, en el que solo se recordaba el triunfo en la Final Four de 2005. Sin embargo, en los playoffs de cuartos de final de la campaña 2018/19, a las puertas de la Final Four de Gasteiz, los pupilos de Velimir Perasovic fueron capaces de imponerse por 68-78, con 16 puntos de Hilliard amén del poderío interior de Vincent Poirier.
«El año pasado –ha evocado Vildoza– conseguimos ganarles, así que vamos a intentar repetir».
Se puede decir que este año el CSKA de Moscú no asusta tanto como en otras campañas. Llevan un balance de 4-3 y ocupan la séptima plaza de la Euroliga, siemdo superados en su pista por un rival tan flojo como el Alba Berlñin, por ejemplo.
Es verdad, ciertamente, que los gasteiztarras no van mejor; es más, suman un balance de 2-3, con las dos últimas y sonrojantes derrotas en casa ante el Barça y el Asvel Villeurbanne.
«Lo primero es jugar duro y físico como juegan ellos, y a partir de ahí, ya veremos», ha resumido por su parte Dusko Ivanovic, que ha subrayado «el placer» que va a significar para él encontrarse con «un jugador emblemático para el baskonismo», como es Tornike Shengelia.
El camino opuesto
Alec Peters, por su parte ha hecho el camino opuesto; es decir, ha pasado de jugara para el CSKA de Moscú –ganando la Euroliga, además– a, previo paso por Anadolu Efes, jugar para Saski Baskonia. El ala-pívot norteamericano ha indicado que «es un equipo con mucho talento, todos sus jugadores han estado en equipos de Euroliga o han sido MVP», por lo que deberán «preparar cosas extra en este par de días era estar preparados».
Respecto al final de los partidos que se deciden en cara o cruz, Peters ha respondido que cuantas más veces jueguen juntos, «más experiencia» tendrán en ese tipo de finales. «Al final de la temporada tendremos más confianza de la que teníamos en el pasado».