En un aviso interno a la plantilla, la dirección de la planta de Landaben comunica la probable suspensión de la producción esas dos jornadas, una decisión que la empresa tomará a principios de la próxima semana según evolucione la situación.
Los problemas de suministro a día de hoy se registran en plantas de la República Checa y Alemania, donde se producen motores y cajas de cambios.
Además, el cierre de concesionarios en países europeos por la pandemia o la imposibilidad de muchos compradores de desplazarse para recoger sus vehículos nuevos ha provocado que se estén saturando las «campas» intermedias de Volkswagen en Europa, desde las que se derivan los vehículos a los puntos de venta.
La saturación de estas «campas» provoca que, a su vez, se saturen las de las propias fábricas, que tienen problemas para almacenar los vehículos que van produciendo.
De confirmarse la suspensión de dos jornadas de producción, está también por decidir la fórmula con la que se aplicaría la medida, han comentado a Efe desde la empresa automovilística.
Una posibilidad es utilizar el ERTE ya negociado por la dirección y la representación social, que se prolongó hasta el 31 de diciembre de este año.