Los Minnesota Timberwolves han sorprendido al seleccionar al escolta Anthony Edwards como el número uno del draft 2020 de la NBA que este año se ha realizado de forma virtual por primera vez en su historia.

Contra todos los pronósticos, Edwards, de 19 años, formado en la Universidad de Georgia, llega a un equipo en plena reconstrucción para formar pareja con el base D'Angelo Russell.

Edwards, que en su año de freshman –su primer año universitario– ha promediado de 19,1 puntos, será clave en la ofensiva de los Timberwolves, que la pasada temporada tuvieron problemas a la hora de anotar.

Mientras, los Golden State Warriors, con el número dos, que en principio estaban interesados en conseguir al propio Edwards, y más con la probable nueva grave lesión de Klay Thompson –a falta de confirmación oficial, se especula que se ha podido dañar el tendón de Aquiles–, han tenido que cambiar los planes sobre la marcha y se han decidido por el pívot James Wiseman, también de 19 años, formado en la Universidad de Memphis.

La desagradable sorpresa ha recaído en las carnes del base LaMelo Ball, de 19 años, a quien los expertos colocaban como la selección número uno y al final se ha tenido que conformar con el tres después de que los Hornets de Charlotte se hayan decidido por él, mientras que los Wolves han «rescatado» a Ricky Rubio para el puesto de base, una vez que el del Masnou haya sido traspasado de Phoenix a Oklahoma y de Oklahoma a Minnesota. Asimismo, los Wolves también se han hecho con el argentino Leandro Bolmaro, elegido por los Knicks en el puesto 23, el mejor puesto que jamás un jugador argentino haya obtenido en el draft de la NBA.

El legendario Michael Jordan, dueño mayoritario de los Hornets, confía en que el hermano del también base Lonzo Ball, de los Pelicans de Nueva Orleans, pueda convertirse en el líder que dirija el ataque y los lleve a ser un equipo ganador.

El punto débil de LaMelo Ball, al igual que su hermano Lonzo Ball, es que no tienen buen juego defensivo, algo que tendrá que mejorar si al final quiere ser líder en la NBA. Asimismo, Michael Jordan no se ha caracterizado nunca por evaluar de forma correcta el talento ajeno.

Chicago rompe la baraja

Los Bulls de Chicago, mientras tanto, se han decidido por el alero Patrick Williams, formado en la Universidad de Florida State, con el número cuatro, dando otra de las grandes sorpresas de la noche, obra del nuevo vicepresidente ejecutivo de operaciones de los Bulls, el lituano Arturas Karnisovas.

De hecho, los pronósticos situaban a Williams como la selección ideal de los Spurs de San Antonio, con el número 11, en su proyecto también de reconstrucción al igual que los Bulls, que tienen como nuevo entrenador a Bill Donovan, quien hasta la pasada temporada dirigió a los Thunder de Oklahoma City.

La quinta selección, obra de loss Cavaliers de Cleveland ha sido por el alero Isaac Okoro, de la Universidad de Auburn; los Atlanta Hawks se han hecho con el pívot Onyeka Okongwu; los Detroit Pistons han drafteado al base francés Killian Hayes, mientras que los Knicks de Nueva York se han quedado con el ala-pívot Obi Toppin. El israelí Deni Avdija, que en todos los pronósticos se presentaba entre los cinco o seis primeros elegidos, ha caído hasta la novena plaza, siendo elegido por los Washington Wizards.

Este año los novatos no jugarán la liga anual de verano de la NBA en Las Vegas (Nevada), e irán casi directamente a la temporada regular, ya que los campos de entrenamiento de la liga están programados para comenzar el próximo 1 de diciembre y la competición oficial para el 22 del mismo mes.