Bidasoa-Irun recibe este martes al Balonmano Benidorm (18.30, Artaleku) en el encuentro correspondiente a duodécima jornada de la Liga Asobal, aplazado en su día por positivos en el conjunto guipuzcoano.

Los de Jacobo Cuétara, segundos todavía en la clasificación, llegan al partido tras una inesperada derrota ante Puente Genil, que rompió una dinámica de siete victorias consecutivas de los bidasotarras.

El equipo de Fernando Latorre, por contra, afronta el partido con optimismo y tranquilidad tras haber ganado el pasado sábado en Aranda a un rival directo y confía en volver a sorprender al Bidasoa, rival que se le ha dado bien en los últimos precedentes.

Antes del inicio de la pandemia, el Benidorm logró empatar en Irun y también fue capaz, pocos días después, de superar al Bidasoa, contra todo pronóstico, en la fase final de la Copa.

«Es muy probable que haya más derrotas»

En la rueda de prensa previa al partido, Cuétara ha relativizado la derrota del pasado fin de semana, avisando de que «es muy probable que haya más derrotas, y hablo en plural, en lo que queda hasta Navidad y tenemos que normalizarlo».

El técnico ha destacado que en tierras andaluzas no acabaron «contentos», no jugaron bien y estuvieron «muy desacertados». «Fallamos muchísimos lanzamientos, no paramos y hay que sumarle en este partido muchísimas pérdidas, que no es habitual. Con esas tres cosas es muy difícil ser competitivo y, aun así, tuvimos nuestro momento», ha analizado.

El entrenador asturiano ha subrayado que cuando el equipo pierde se crea un mensaje negativo en el entorno. «Parece que es porque lo hemos hecho muy mal. No, el equipo rival también juega. Hay que tener cuidado con estar siempre señalándonos, porque los demás juegan, los árbitros, la suerte y otros contextos influyen», ha explicado.

Respecto al Benidorm, ha destacado el «buen momento» del rival, contra el que espera un partido «duro», ya que su forma de jugar «no le encaja muy bien» al Bidasoa y le «genera problemas».

Para este partido, el Benidorm, que lleva concentrado en Irun desde el pasado domingo, no podrá contar con Carlos Grau, quien ha regresado a Alicante por motivos personales, pero sí con Iván, cuyo fichaje fue posterior a la fecha inicialmente prevista para este compromiso.